Proyectan crecimiento en las remesas para 2021 pero prevalece incertidumbre

Durante el año 2020, las remesas que extienden los nicaragüenses desde el exterior a sus familiares presentaron un crecimiento del 10.04% en comparación al año anterior, según las estadísticas oficiales. Para este 2021, proveedores de servicios de remesas pronostican que el crecimiento continúe.

Roberto Rondón, gerente general de AirPak Nicaragua, aseguró durante una entrevista para la plataforma de educación financiera y economía Dele Peso a sus Pesos, que hasta el mes de enero continúan viendo un crecimiento positivo a nivel interno de más o menos el 15% en los flujos, y proyectan un cierre anual de un 7% o 10% en crecimiento. A pesar de la caída que estas tuvieron durante algunos meses por la pandemia del COVID-19.

Importantes remesas de EEUU

Las remesas representan una de las principales fuentes de ingresos, pues equivalen aproximadamente al 15% del Producto Interno Bruto (PIB) de Nicaragua. Con la pandemia del coronavirus, hubieron diversas proyecciones sobre que estas se desplomarían a nivel mundial, pues los principales países emisores estaban siendo seriamente afectados por el confinamiento y el desempleo.

Sin embargo, tras la caída presentada en abril, en los meses posteriores las remesas familiares presentaron una recuperación, dejando un ingreso total de 1,851 millones de dólares, la cifra más fuerte registrada durante los últimos años, según destacó Gisella Canales, directora de Dele Peso a sus Pesos.

Rondón explica que el corredor de Estados Unidos fue clave para esta recuperación, pues tuvieron un crecimiento 4 veces superior a lo que se veía en años anteriores. Las remesas familiares provenientes de Estados Unidos dejaron un total de 1,111 millones de dólares, lo que lo convierte en un país clave para estos flujos. «Un factor interesante es que en mayo – junio, cuando se repartió el incentivo de gobierno (estadounidense), inmediatamente los nicaragüenses mandaron plata a Nicaragua, parte de ese incentivo que el gobierno les dio, se dieron la vuelta y mandaron al país» destacó.

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De igual forma sucedió con España, que representa el segundo corredor más fuerte de emisión de remesas a Nicaragua. «En España hemos visto que muchas de las compatriotas que están allá son asesores del hogar y ellas escogieron una labor muy importante porque cuidaban a adultos mayores sobre todo, entonces vivían en la casa y eran las personas que iban a hacer súper y a la farmacia, cogieron una labor crucial que les permitió mantener sus empleos y seguir enviando remesas» agregó Rondón.

El gerente de AirPak sostuvo que estos flujos provenientes tanto de Estados Unidos, principalmente, como de España, ayudaron a «tapar caídas» en otros corredores importantes como Panamá y Costa Rica. Pero destaca que el crecimiento en este 2021 aunque estará presente, será menor, pues ya se ha dado el salto mayor de crecimiento y se mantendrá en menor proporción.

Riesgos en las remesas

Pero el crecimiento de las remesas nicaragüenses podría verse dificultado debido a una serie de medidas que ha venido implementando el gobierno recientemente. Dayra Valle, especialista en políticas públicas, destaca que la reforma a la Ley de Personas Consumidoras y Usuarias, traerá efectos negativos en todo el sector financiero, incluyendo a las empresas que proveen servicios de remesas.

«Hay una relación de corresponsalía entre las remesadoras, entonces igual que sucede con los bancos, también tienen que tener mecanismos de prevención de lavados de activos y parte de estos mencionan que las remesadoras deben hacer control de sujetos que estuvieran en las listas del Grupo de Análisis Financiero Internacional (GAFI), y una vez que encuentran que una persona que está haciendo transacciones a traves del sistema de remesas es una persona que está en la lista, entonces tienen que tomar una decisión de hacer el envío o negar la transferencia y reportarla» explica.

AFP/NI

El problema es que la nueva ley estaría obligando a que los proveedores de servicios de remesas realicen transacciones con estas personas que han sido señaladas, pues de negarse estarían siendo penalizados. Pero al hacerlo, estos podrían quedarse sin sus corresponsalías por aceptar negocios con personas que han sido sancionadas por violaciones a los derechos humanos.

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«Es muy grave porque un nicaragüense que se encuentra en España, donde esta una remesadora, y esta tiene una relación de corresponsalía con una local, no podría por ejemplo trasladarle. Va a poner en jaque (la ley) a las remesadoras al igual que a los bancos» advierte Valle.

Por otro lado, destaca que Estados Unidos es el que genera la lista OFAC y en esta están una serie de funcionarios sancionados, «imagínense que estos funcionarios quieren hacer transacciones a través de remesas ¿qué van a decir remesadoras en Estados Unidos? ‘no, yo no me quiero ver en la situación de que el Departamento de Estado me llame la atención y hasta pueda tener sanciones aquí a lo interno por tener una relación con una remesadora en Nicaragua’. Estamos hablando de que Estados Unidos es el principal emisor de remesas».

«Es un riesgo reputacional, un riesgo operativo y un riesgo desde diferentes magnitudes» destaca la experta. Sin embargo, la polémica ley continúa siendo un dilema para otros expertos que consideran aún es muy pronto para afirmar que la reforma tiene como fin el retornar a personas sancionadas al sistema financiero nacional. Mientras tanto, Valle sostiene que tiene «la esperanza de que se elimine la reforma, porque la pérdida es mayúscula» entre «resucitar a los sancionados para que entren al sistema, frente a todo el flujo que no vamos a percibir». «Las remesas mueven la economía» destaca.