Cada vez son más los nicaragüenses que están llegando a los Estados Unidos-legal o ilegal– para solicitar un estatus de asilo político en este país,en vista que muchos de ellos su vida está en peligro o sufren algún tipo de amenaza, encarcelamiento o persecución Estatal en Nicaragua
Solo en el año 2019, la Comisión Permanente de Derechos Humanos con sede en Miami registró más de 289 ciudadanos que emitieron la solicitud de asilo ante las instancias correspondientes de emigración argumentando sufrir asedio, persecución y amenazas de muerte por parte de fuerzas de choque o paramilitares que dirige el mandatario Daniel Ortega.
“Al concluir el año 2019 sumaron un total de 289 casos procesados, y todavía quedaron algunos pendientes que podría sobrepasar los 300 casos, eso te da una idea lo grave que está la situación de los emigrantes nicaragüenses” manifestó Manuel Abaunza funcionario de la CPDH-Miami.
Daniel Ortega Saavedra es acusado por organismos internacionales de derechos humanos de realizar múltiples asesinatos, torturas y encarcelamiento a decenas de ciudadanos que se manifestaron desde abril del 2018 en contra de diversas medidas gubernamentales, así mismo enfrenta fuertes señalamientos de crímenes de lesa humanidad ejecutados por policías, parapolicías y fuerzas de choque.
Abaunza dejó claro que las cifras oficiales de solicitud de asilo no son públicas, lo que puede interpretarse que los datos podrían ser muy superiores a los que maneja la CPDH, no obstante, ellos llevan un registro mediante la solicitud de ciudadanos detenido en cárceles de emigración en diferentes ciudades de los Estados Unidos o bien familiares que llegan hasta la oficina para solicitar apoyo.
El defensor de los derechos humanos remarcó que la solicitud de asilos es casi la parte final de un proceso legal y que la dura situación la atraviesan al momento de querer llegar a suelo norteamericano dónde tiene que sobreponerse a difíciles situaciones con coyotes, carteles en México, estafadores e incluso con autoridades policiales corruptas que los chantajean, a cambio de dejarlos pasar hacía Estados Unidos.
“El más reciente caso es de un nicaragüense que las mafias le pidieron 12 mil dólares por un familiar que estaba secuestrado en México y nos hemos dado cuenta de varios casos”afirmó Abaunza. Agregó que el otro problema es el encarcelamiento de emigrantes nicaragüenses en diversos Estados dónde tienen que esperar hasta un año preso, con condiciones muy precarias.
“En los centros de detención hay un alto número de detenidos, para muestra un botón, en el Estado de Georgia, para el mes de octubre del año pasado había más de 600 nicaragüenses presos”expresó el defensor de derechos humanos. Lo anterior fue sustentado con el testimonio de “Carlos” un joven universitario que salió del país por amenaza de muerte por fanáticos de Ortega y que tuvo preso por 56 días, tiempo que su familia lo pensaba muerto en su viaje hacia Estados Unidos. “Hablemos del número de nicaragüenses, por cada dormitorio es exagerado, yo estuve en dormitorio de 80 personas había hasta 20 de Nicaragua”aseguró el joven universitario capitalino.
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