El periodista y empresario Henry Briceño, brindó el pasado viernes una entrevista al medio Confidencial sobre el destierro que le tocó vivir junto a su familia.
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Captura en San Rafael del Sur
Briceño relata que se encontraba el pasado 24 de noviembre con su familia en la vivienda donde habitaban en San Rafael del Sur, en Managua, cuando se presentaron 4 patrullas encabezadas por el jefe policial del municipio, comisionado mayor Lázaro Clemente Quintanilla Álvarez.
«Usted es el líder de esta oposición aquí, y por tanto está detenido a partir de este momento está detenido y va a ser desterrado», narra Briceño que le dijo el comisionado Quintanilla.
Después que el periodista intentó avisarle a su esposa de lo que estaba pasando, 20 agentes policiales se bajaron de las patrullas de forma violenta y se tomaron la residencia para detener a toda la familia que está compuesta de 4 miembros.
«A mi esposa le pusieron dos policías, a mi hija otros dos, y a mi hijo de forma grosero le dijeron (un niño de 11 años) sentate muchacho j****** ahí», dijo Briceño.
Destierro a Costa Rica
A diferencia de otros casos, Briceño y su familia después de ser capturados no fueron llevados a la cárcel, sino iban en las patrullas hacia Rivas, donde son cambiados de las patrullas a vehículos civiles.
«La policía de San Rafael del Sur nos entregó a la policía de Rivas, ellas se encargan de llevarnos hasta la frontera», declaró el ahora desterrado por la dictadura sandinista.
Briceño creía que su paso hacia Costa Rica podía ser por el camino normal que recorren quienes salen y entran al país, pero para su sorpresa, la Policía Nacional de Rivas consultaron al comisionado Horacio Rocha en Managua, quien cambio el trayecto del camino.
Los carros donde los llevaban retrocedieron y luego avanzaron unos kilómetros donde todo era «montaña», hasta llegar donde estaban miembros del Ejército de Nicaragua, aseguró Briceño.
«Llegamos donde estaban este grupo de soldados y nos dijeron bájense», cuenta Briceño que tenía la idea que los iban a matar.
Los militares los hicieron caminar y ponerse en fila para lo que llamaron «un operativo» más con la familia.
«Era un hombre regordete, un miembro del Ejército, y comenzaron a encender todos los teléfonos y a tomarnos fotos y a filmarnos», relata el periodista.
Al terminas la sesión de fotos, les entregaron pasaportes con fecha de emisión de ese mismo día del destierro, les insultaron y obligaron a caminar en medio del monte hacia Costa Rica.
Ingreso a Costa Rica
Para Briceño era de sentido común caminar en cierta dirección que indicara que saldrían a territorio tico, y fue así que llegaron hasta donde esta un guardia costarricense que en principio se sorprendió al ver salir del «monte» a toda una familia, pero luego de explicarle la situación, las autoridades del vecino país les atendieron bien.
En la mañana del lunes les atendió el director general de Migración y Extranjería de la frontera tica, quien les envió en una unidad de la institución hasta San José.
Lo que queda en Nicaragua
Según información revelada por Briceño, la Policía Nacional tiene tomada todas sus propiedades, así como intervenidos los celulares de amistades cercanas a la familia, por lo cual ha optado de no comunicarse con ellos para no «comprometer» su seguridad.