Hace unos días, Daniel Ortega y Rosario Murillo dieron la orden de desalojar a muchos residentes que vivían desde hace años en los alrededores de El Carmen, lugar donde reside la pareja dictatorial y que es parte del perímetro de seguridad que extendieron desde abril de 2018.
Desde el jueves 20 de febrero de 2025, agentes policiales al servicio de la dictadura, llegaron a las casas con la orden que tenían que desalojar en un plazo de 24 horas o serían sacados a la fuerza, según revelaron fuentes bajo la condición de anonimato al periodista Miguel Mendoza.
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Los agentes policiales le dieron la opción a los afectados de desmantelar sus casas y le pusieron a disposición camiones de la Alcaldía de Managua, para que le transporten sus pertenencias.
El robo es tan descarado que están desalojando a muchas familias sin justificación alguna. Muchos de los afectados, que incluyen hasta militantes sandinistas y trabajadores del Estado, han vivido por más de 30 años en el lugar.
Muchos no tienen dónde vivir
Según las fuentes que revelaron esta información, se rumora que en las casas confiscadas harán una supuesta base militar o serán entregadas a grupos paramilitares para fortalecer la seguridad de los dictadores.
Esta situación ha generado mucha zozobra e incertidumbre, ya que muchas familias se han quedado sin hogar. Los desalojos van desde Lugo Renta Car, Prolar, Altagracia sur, en el sector del Colegio La Mazzarello, Montoya.
Muchas personas no pueden denunciar la situación porque la vigilancia es extrema en el lugar. Han instalado cámaras de seguridad en cada poste de tendido eléctrico, al menos cuatro agentes policiales se encuentran en cada esquina con un fuerte retén con muros, miguelitos, vallas y garitas.
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Aparte de eso, hay patrullaje constantemente, retienen vehículos y oficiales con perros en búsqueda de explosivos.
Muchos de los afectados habían dejado su casa o la habían alquilado por ser una zona militarizada por el régimen. Se conoce que los agentes policiales preguntan por las personas que se han ido del país.
Alrededor del reparto El Carmen hay al menos 31 negocios y cerca de 350 viviendas que han sucumbido ante las fauces del perímetro de seguridad instalado por Ortega. El temor de los dictadores es tan grande que hasta mandó a sellar en su momento los alcantarillados y a poner faroles en los cauces.
Nicaragua Investiga
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