Las tropas paramilitares acompañaron la caravana sandinista y luego empezaron matanza
El repliegue con el que Ortega se empecinó para no mostrarse disminuido ante su militancia se realizó este viernes tal y como lo anunció Rosario Murillo, y como se filtró a los medios de comunicación que sería; nadie a pie, todos en vehículos o motocicletas, al parecer por razones de seguridad, ya que antes Ortega y su esposa caminaban hacía Monimbó y mucha gente salía a saludarlos.
Hoy, con más del 70% del pueblo en su contra, según las encuestas, Ortega se vio obligado a tener un repliegue inusual y por si fuera poco, a triplicar su seguridad, siendo fuertemente custodiado por policías.
Durante la caravana, a como constatan estas fotografías, Ortega no tuvo ningún reparo en hacerse acompañar de los grupos paramilitares, que con armas en mano y a bordo de camionetas de instituciones del Estado lo siguieron en el recorrido hasta la ciudad rebelde.
Paramilitares armados acompañan caravana de Ortega a Masaya/ EFE
La fila de vehículos solo pudo llegar hasta la Estación Policial de Masaya, donde no hay barricadas. La Plaza de Monimbó, donde históricamente se realiza el Repliegue no estuvo al alcance de Ortega, a quien los monimboseños acusan de genocida y le exigen su renuncia amurallados con barricadas para proteger sus vidas, ya que la policía ha matado a 35 masayas, desde el mes de abril.
Sus medios no realizaron el derroche de recursos para mostrar tomas panorámicas y aéreas, como lo hacían normalmente en este evento. La mayoría de pobladores cerraron sus puertas en señal de rechazo. Sin más remedio, Ortega emitió su discurso en el complejo policial, junto al Alcalde sandinista de la ciudad Orlando Noguera y el Comisionado Ramón Avellán. Esta vez no centró sus acusaciones en contra «del imperio» o del «MRS», sino que despotricó en contra de los liberales, a quienes acusó de «promover el odio y la destrucción».
«Nosotros estuvimos 17 años en la oposición y nunca se nos ocurrió mandar a quemar la casa de un liberal», dijo Ortega al tiempo que el grupo de simpatizantes le aplaudía y le lanzaba vivas.
«En primer lugar tenemos que defender la paz, la estabilidad, recuperar la paz que teníamos, gracias a Dios venimos avanzando en este proceso», dijo.
El discurso de Ortega fue inusualmente breve ;12 minutos. Al terminar, abrazó a los policías encapuchados, se tomó fotos sonriente con ellos y salió de la ciudad. De inmediato, inició el ataque.
Matanza con armas militares
La Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos presidida por Álvaro Leiva, indicó que a las 7: 15 de la noche se registraban dos muertos y varios heridos. Alertó que estaban atacando con armamento bélico: «derribaron los tranques del barrio Holanda en Masaya, fueron derribados por detonaciones de RPG7», advirtió.
Hasta el cierre de esta edición los ataques continuaban. No hay actualización de datos desde esa hora, debido a la intensidad de los combates que impiden a los organismos de derechos humanos y periodistas acceder a información.
El Representante de la CIDH Paulo Abrao, lamentó el ataque simultáneo que sucedía en Masaya, Monimbó y UNAN y pidió al Gobierno ordenar el cese de los enfrentamientos.
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