El boxeador nicaragüense Román “Chocolatito” González anunció su retiro del pugilismo para el próximo 2024, esto tras pasar un año entero sin poder subirse al cuadrilátero y disputar un título internacional.

El retiro del pugilista cercano al régimen Ortega-Murillo, lo hará después de realizar tres peleas de las que aún no tiene en concreto rival, pues hasta el momento solo ha anunciado los lugares en los que se podrían llevar a cabo.

“En este año 2024 posiblemente haya una pelea en Japón que se está moviendo en ese lado en Asia y también ya se está moviendo en el lado de Inglaterra”, expresó González en una entrevista para el Canal 8 de televisión, propiedad de la familia gobernante de Nicaragua.

Román González obligado a pelear en Japón por no tener visa de EE.UU

Mueve pelea en Japón para 2024

La posible pelea de la que habla Román González es la que se había programado para el 31 de diciembre de este 2023, en Japón, y que posteriormente el mismo boxeador confirmó que ya no se realizaría.

El boxeador agregó que para la pelea en Japón, ahora programada para marzo, aún “estamos nada más viendo con quien” y expresó que sueña con “una oportunidad” de las 118 libras y disputar ese título, pues él se ha mantenido en el de las 115.

“Esperando en Dios que es lo que pueda venir en el camino y uno de mis deseos es hacer una pelea y luego una pelea de título de la 118… luego quiero retirarme con una pelea aquí en mi país”, sostuvo.

No sabe contra quien pelear

Cuando le preguntaron si todavía sueña con una pelea del millón de dólares respondió que “hasta más”, pero que eso depende de con quien vaya a pelear.

Una de las interrogantes que no supo responder y prefirió evadir, fue la de con qué campeón en específico le gustaría enfrentarse.

Román González cumplió un año de no pelear, el pasado 3 de diciembre, esto tras ser derrotado en la culminación de la trilogía en la que se enfrentó contra el boxeador mexicano Juan Francisco “Gallo” Estrada en 2022, en la ciudad estadounidense de Glendale del estado de Arizona, y en la que dijo no merecía perder.

El boxeador nicaragüense no pudo realizar ninguna pelea este 2023, en territorio estadounidense por falta de visa, según declaró él mismo, a finales de noviembre, situación que lo llevó a conformarse con la supervisión del negocio de apartamentos que recién construyó en Nicaragua.