Nicaragüenses en Estados Unidos continúan denunciando la presencia de personas ligadas al Frente Sandinista en Norteamérica.
La mañana del pasado lunes las puertas del consulado de Nicaragua en Estados Unidos amanecieron con carteles que denunciaban la presencia de presuntos paramilitares que están solicitando estatus de refugio o asilo en dicho país.
«Óscar Leonel García es paramilitar de Matiguás y ahora anda pidiendo asilo en USA», señala el afiche.
En los últimos meses la migración de nicaragüenses hacia Estados Unidos se ha incrementado, y entre ellos también van personas que son familiares de funcionarios sandinistas, o que estuvieron involucrados en algún momento con el sandinista, expresó a Nicaragua Investiga la abogada y defensora de derechos humanos Astrid Montealegre.
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«La inmigración se ha duplicado semana a semana lo cual incluye un incremento en inmigrigantes que fueron trabajadores estatales o son familiares de miembros del FSLN», dijo, aunque también destacó cuando se identifica a una persona afín al sandinismo, lo investigan hasta poder comprobar sus vínculos.
«(Las medidas) no se han relajado, pero no están sujetos a las sanciones. Los familiares tienen derecho a solicitar asilo y EEUU la obligación de revisar su caso. Tienen que evaluar si esa persona participó en la violacion de derechos humanos», destaca. La presencia de estas personas en territorio estadounidense, donde hay muchos exiliados nicaragüenses representa para la comunidad un «impacto psicológico» al ver a un abusador, añadió.
Crisis alcanza a seguidores de Ortega
Para la defensora de derechos humanos nicaragüense Haydeé Castillo, este incremento en la migración de personas allegadas a funcionarios sandinistas significa que la crisis sociopolítica y económica en que Nicaragua está sumergida ya alcanzó a los fanáticos del Frente Sandinista y los está obligando a buscar opciones económicas en el país que tanto critica Daniel Ortega.
«La crisis ha escalado a unos niveles tan graves que ya no se escapa ni siquiera la misma gente que en algún momento estuvo de acuerdo con el régimen», señala.
Castillo coincidió, por aparte, con Montealegre, y detalló que en los últimos meses el incremento de migrantes sandinistas ha sido notorio, pero también expresó que no todos los que en su momento apoyaron a la dictadura de Daniel Ortega lo hicieron por compartir la ideología, sino por necesidad y recalcó en la necesidad de distinguir entre trabajadores estatales y paramilitares.
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«Tenemos que ser conscientes de que no toda persona que trabaja al estado de Nicaragua lo hace necesariamente porque está de acuerdo con el régimen. Sabemos que algunas personas lo hacen porque no tienen otras opciones, pero al final se terminan cansando del maltrato y que los obliguen a hacer cosas en las que no están de acuerdo», expresa. Castillo sugiere que estas razones podrían estar siendo las que llevan a estas personas a tomar la decisión de migrar.
Autoridades estadounidenses con medidas contra colaboradores de Ortega
A mediados de noviembre del 2021, la Casa Blanca prohibió la entrada a funcionarios sandinistas, principalmente a Rosario Murillo, los hijos de la pareja presidencial y otras personas «que contribuyan o hayan contribuido al clima represivo en Nicaragua».
«Se suspende la entrada a los Estados Unidos, como inmigrantes o no inmigrantes, de las siguientes personas miembros del Gobierno de Nicaragua, incluidos los funcionarios electos y los miembros de su personal. Alcaldes, vicealcaldes o secretarios políticos que planearon, ordenaron, asistieron, ayudaron e instigaron, cometieron o participaron de otra manera, incluso a través de la responsabilidad de mando, en graves abusos o violaciones de los derechos humanos para castigar a manifestantes pacíficos o negar las libertades fundamentales de los nicaragüenses, o que intentaron o conspiraron para hacerlo», expresa el comunicado de Joe Biden difundido el 16 de noviembre del 2021.
Sin embargo, desde antes de que esta normativa estuviera impuesta ya habían iniciado a impedir la entrada de algunos funcionarios de Ortega a Estados Unidos, como es el caso del Juez Otoniel Arauz Torrez .
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