Haber encarcelado a monseñor Rolando Álvarez ha arrastrado a Daniel Ortega a pagar un costo político que no habría calculado, según analistas. La noticia sobre su posible excarcelación y destierro a Roma agitó nuevamente al país, llegó a los titulares de medios internacionales y voces calificadas se pronunciaron.
«Monseñor es un mártir de las libertades públicas en Nicaragua y es el preso político más incómodo que pueda tener la dictadura porque es un hombre con una tremenda credibilidad, tanto a lo interno como fuera del país», expresó el analista político Israel Lewites Cornejo.
Pero, una vez más, el obispo de Matagalpa se habría negado a ser desterrado, dejando a Ortega «en un callejón sin salida».
En agosto de 2022 hablé por teléfono con Mons. Álvarez cuando estaba todavía secuestrado en Matagalpa. En aquella ocasión me dijo que no se iría de Nicaragua por ningún motivo, a menos que el Papa se lo mandara. Añadió que era una decisión en conciencia ante Dios.
— Silvio José Báez (@silviojbaez) July 6, 2023
«Ortega ya no está sacando ningún provecho de tener a monseñor preso. Todo lo que está obteniendo es costo político», sostuvo el también escritor.
Agregó que el dictador «está desesperado por deshacerse» del prelado, pero «sin mandar un mensaje de debilidad a sus bases», por lo que no puede dejarlo libre en Nicaragua.
Régimen anhela que monseñor ceda
La salida para el régimen sandinista es que sea el mismo Rolando Álvarez quien ceda al destierro, sin embargo, el líder religioso «es un hombre aferrado a sus principios, a su fe y a sus derechos como nicaragüense». La posición del líder religioso nuevamente provocó los aplausos.
#BREAKING: Confirmado. Monseñor Rolando Álvarez regresó a prisión por no querer aceptar las absurdas condiciones de la dictadura de Ortega para su liberación. ¡Ejemplar testimonio de pastor!
— Alejandro Bermudez (@albermudezr) July 6, 2023
Lewites Cornejo señaló que «estamos nuevamente ante un intento de Ortega de quitarse esa «papa caliente» porque, sin lugar a dudas, la dictadura no es inmune al aislamiento internacional y al desprestigio».
Encarcelamiento del obispo es un «error»
Ejemplificó la posición del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, quien aseguró que pediría a Ortega la libertad de monseñor Álvarez, cuya aprehensión calificó de «error».
Aunque el aliado del dictador no ha vuelto a referirse sobre el tema, Israel Lewites no descarta que el mandatario brasileño de izquierda haya intentado hacer algo para «maquillar» a Ortega.
La investigadora Elvira Cuadra también afirma que, mientras el obispo sea un prisionero político, Daniel Ortega y Rosario Murillo «pagan un costo político muy alto», incluso aunque lo excarcelen y lo dejen recluido en un lugar dentro de Nicaragua.
Cuadra se basa en que el régimen, al excarcelar a 222 prisioneros políticos, demostró que no quiere tener ningún preso político de proyección pública.
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La información sobre la salida del obispo de Matagalpa de la cárcel «La Modelo» se filtró el cuatro de julio. La situación se mantuvo tensa, mientras la dictadura y la jerarquía de la Iglesia guardaban silencio públicamente.
Cardenal Brenes no ha visto a monseñor Rolando Álvarez
No fue hasta el mediodía de este cinco de julio que el cardenal Leopoldo Brenes, Arzobispo de Managua, aseguró que monseñor Álvarez sigue preso en «La Modelo», aunque admitió que no lo ha visto desde hace meses.
Para Israel «podríamos estarnos topando con un escenario en donde monseñor no aceptó las condiciones para su liberación (destierro) y dijo «no salgo», entonces ante esa situación lo que le queda a la dictadura es tratar de borrar el hecho y ¿a quién podría estar pidiéndole el favor? A Polito».
De hecho, no es la primera vez que el cardenal Brenes acusa a los medios independientes de «desinformar». En agosto de 2022 acusó a la prensa no afín al régimen de publicar «mentiras» sobre la información que llega al Vaticano desde Nicaragua y el exilio de sacerdotes, cuya situación ha desestimado.
La investigadora Martha Patricia Molina, autora del informe «Nicaragua: ¿Una Iglesia perseguida?», dijo al respecto que «la especulación es válida cuando el silencio impera».
«Sueño con una Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) que informe y se comunique con su pueblo. Todos tenemos puestos los ojos en monseñor Rolando Álvarez«, manifestó a este medio.
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