La Fiscalía de Guatemala aseguró este viernes que sus investigaciones determinaron que las elecciones en las que resultó elegido Bernardo Arévalo, contra quien lleva a cabo una ofensiva judicial, son «nulas» por supuestas irregulares en la primera vuelta.
En conferencia de prensa, la fiscal Augenia Morales afirmó que hubo «anomalías en las acta finales de cierre de escrutinio» por lo que «son nulas de pleno derecho para las elecciones de presidente, vicepresidente, diputados, corporaciones y diputados al Parlacen (Parlamento Centroamericano)».
La funcionaria explicó que las actas no fueron aprobadas «por el pleno del Tribunal Suprema Electoral (TSE)», por lo que no debieron utilizarse para consignar los resultados.
La fiscal señaló que la investigación se llevó a cabo por denuncia de «un ciudadano», que no identificó, y tampoco mencionó responsables de las supuestas irregularidades porque el caso está bajo reserva.
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El jefe de la fiscalía contra la Impunidad, Rafael Curruchiche, presente en la rueda de prensa, aseguró que toda «la información que fue consignada en el acto de cierre y escrutrinios en todas las juntas receptoras de votos deberías de anularse».
«Esta información penal nosotros la vamos a presentar al Tribunal Supremo Electoral para que ellos la puedan analizar en los próximos días» y serán esa institución la que «logre establecer lo que pueda suceder», la que «tomará la decisión al respecto», aseveró.
En la misma rueda de prensa, la Fiscalía también señaló a Arévalo de supuestas ilegalidades en la formación de su partido, Semilla, en 2018, además de un presunto caso de lavado de dinero, por lo que insistió en que se debe retirar su inmunidad de presidente electo.
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Las acusaciones de este viernes son un nuevo intento de la Fiscalía, dirigida por la fiscal general, Consuelo Porras, por evitar que Arévalo, quien sorpresivamente ganó los comicios en segunda vuelta en agosto, asuma el poder el 14 de enero, según sus partidarios.
«Rompimiento democrático»
A mediados de noviembre, la fiscalía presentó una solicitud para despojar de inmunidad a Arévalo y la vicepresidenta electa, Karin Herrera, a quienes acusa de instigar a estudiantes que ocuparon de mayo de 2022 a junio de 2023 la Universidad de San Carlos, la única estatal del país.
En reiteradas ocasiones, Estados Unidos, la Unión Europea, la Organización de las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos (OEA) han alzado la voz para criticar las maniobras de la Fiscalía contra Arévalo.
Este viernes, la OEA reaccionó de inmediato al pronunciamiento de la Fiscalía.
«El intento de anular las elecciones generales del presente año constituye la peor forma de rompimiento democrático y la consolidación de un fraude político contra la voluntad del pueblo», afirmó la secretaría general de la OEA, en un comunicado.
Miles de guatemaltecos encabezados por Arévalo, marcharon el jueves en la capital contra la corrupción y para exigir la renuncia de la fiscal general, a quien acusan de orquestar «un golpe de Estado» contra el presidente electo.
La amplia victoria del socialdemócrata Arévalo en el balotaje de agosto frente a la ex primera dama Sandra Torres, considerada la candidata del continuismo, es atribuida a las esperanzas de cambio que generó con su promesa de lucha contra la corrupción, mal endémico en Guatemala.
Analistas aseguran que eso ha despertado temores entre poderosos sectores políticos tradicionales y empresariales.