Desde el pasado 12 de julio no se sabe sobre el paradero de la periodista y activista feminista Fabiola Tercero, según denunció en sus redes sociales la Asociación de Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua PCIN, que indicó que han tratado de comunicarse con ella por diferentes vías, pero no ha sido posible.
«Demandamos que en caso de haber sido detenida por la policía, se les respeten su integridad personal, sus derechos y se informe públicamente sobre su situación», expresó el colectivo gremial con sede en el exilio en Costa Rica.
PCIN asegura que están «preocupados» porque tienen reportes de varias desapariciones de periodistas, sin embargo, no ofrecieron mayores detalles sobre esta denuncia.
El Centro de Asistencia Legal en Derechos Humanos CALIDH señaló directamente al Estado de Nicaragua de haberla desaparecido.
«La feminista nicaragüense Fabiola Tercero siempre habló claro y fuerte contra las violaciones de derechos humanos de la dictadura. El Estado la ha desaparecido», indicó el organismo que además exigió su liberación inmediata.
No estaba en labores políticas ni periodísticas
Durante más de cinco años Fabiola Tercero promovía un espacio cultural y literario llamado El Rincón de Faby, el cual estaba completamente ajeno a actividades políticas o periodísticas.
«Fabiola promovía la lectura y el intercambio de libros. Algo peligroso en una dictadura totalitaria. Más de 263 periodista han tenido que dejar el país producto de la persecución del régimen sandinista», denunció en su cuenta de X, el exembajador de la OEA en Nicaragua Arturo McFields.
El poeta exiliado José Alberto Montoya, dijo que «la dictadura la secuestró después allanar su casa, sin ningún motivo, sin razón, siendo otro acto completamente injusto».
Diferentes cuentas en redes sociales denunciaron que desde hace varias semanas Fabiola había sido sometida a una especie de régimen carcelario domiciliar en el cual se le exigía ir a firmar diariamente al distrito policial más cercano a su casa.
«Hacemos un llamado a la comunidad internacional, a las organizaciones de derechos humanos, en particular aquellas que defienden la libertad de prensa, para que intensifiquen su apoyo y vigilancia sobre la situación de Nicaragua», demandó PCIN.