La casa del ex diplomático Edgar Parrales, quien fue secuestrado hace un día por civiles, fue allanada esta mañana del martes 23 de noviembre, según lo confirman diversas denuncias en redes sociales.
El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) ya había alertado horas antes que se constataba presencia policial «con acción intimidante». Se conoce que la vivienda se encontraba vacía al momento de los hechos.
De igual forma, Carmen Dolores Córdova, esposa de Parrales, confirmó al Cenidh que el ex diplomático se encuentra detenido en las inmediaciones de “El Chipote” y que «solamente permitieron dejarle agua, lo que es preocupante por su grave situación de salud».
Desde el momento de su desaparición, Córdova había advertido ante el medio 100% Noticias sobre la delicada situación de salud de su esposo, quien debe seguir específicos cuidados en su alimentación y tomar medicamentos ya que hace diez años le fue extirpado el intestino grueso, y de no seguir tales indicaciones «se descompensa».
El nuevo Chipote, la siniestra cárcel a la que Ortega envía a sus rivales
Parrales se suma a la larga lista de opositores al régimen de Daniel Ortega que han sido detenidos en los últimos meses. Una ola de persecusión que ha recobrado intensidad en el contexto de las polémicas votaciones que le aseguraron un nuevo periodo en el poder.
La detención
El secuestro de Parrales, quien fue embajador de Nicaragua ante la Organización de Estados Americanos (OEA) en la década de los ochenta, se dio durante la tarde del lunes en las afueras de su casa de habitación.
Según comentó su esposa a otros medios, Parrales se encontraba saliendo de su vivienda a realizar algunas gestiones bancarias cuando “aparecieron dos hombres de civil que lo metieron por la fuerza en un vehículo y se lo llevaron”.
Se alude que su detención se dio a través de un secuestro ya que quienes capturaron al ex diplomático de 79 años iban vestidos de civil y no presentaron ninguna orden de captura. A pesar de que ya ha sido confirmada su detención, se desconocen las razones por las cuales le acusan las autoridades.
Este tipo de detención arbitraria resulta bastante habitual por parte del régimen sandinista. Muchos opositores han sido detenidos por civiles, sin presentárseles orden de captura, y actuando de forma sigilosa para evitar la presencia de testigos; informando oficialmente de sus detenciones hasta horas o incluso un día después de que ha sido ejecutada.
La familia del también ex sacerdote alega que su secuestro se trata de una represalia de parte del régimen sandinista por las últimas entrevistas que concedió a los medios de comunicación explicando las consecuencias del último capricho de Ortega de sacar a Nicaragua de la OEA.
La misma mañana en que fue secuestrado, Parrales estuvo presente en la revista matutina de Canal 10. El ex diplomático era de los pocos opositores que continuaban brindando declaraciones públicas ante la creciente oleada represiva desatada por Ortega acusando a todo aquel que critique su administración de violar la “Ley de Soberanía del país”, o bien la “Ley de Ciberdelitos” si algunas de estas han sido extendidas por medio de redes sociales.
De acuerdo con las declaraciones brindadas por la familia Parrales a diversos medios, días atrás agentes de la Policía Nacional habrían intensificado el asedio a su vivienda ubicada en el sector de Los Robles.
Trayectoria de Parrales
Parrales nació el 16 de noviembre de 1942. Fue sacerdote diocesano. Como defensor de la Teología de la Liberación, fue uno de los religiosos que al triunfo de la revolución sandinista en 1979 apoyó al nuevo gobierno, llegando a ocupar el cargo de Ministro de Bienestar Social (1980-1982) y el de embajador en la OEA (1982-1986) cuando Ortega ejerció el poder por primera vez.
Durante los últimos años se desempeñaba como profesor de leyes en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN), de donde fue despedido tras el estallido de la crisis sociopolítica en abril de 2018.
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