Recuperación económica de Nicaragua “en el limbo”

La recuperación económica de Nicaragua jamás ha estado sumergida en tanta incertidumbre como ahora, asegura un economista consultado por Nicaragua Investiga.

Mientras los países de la región avanzan hacia un contexto posterior al Covid-19, adoptando medidas definidas en materia de política fiscal, de gasto, tributación y gestión de la deuda pública, “en Nicaragua no hay planes ni estrategias de ningún tipo”, asegura el especialista financiero, que por seguridad prefiere no revelar su nombre.

“Mientras otros gobiernos se enfrentan ante la oportunidad única para adoptar una estrategia de desarrollo multidimensional que favorezca la aplicación sólida de mejores políticas públicas en materia de protección social, inclusión y la reducción del trabajo informal, la recuperación económica de Nicaragua está en el limbo”, aseveró.

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Indicó que sumado al aislamiento cada vez mayor en materia de diplomacia internacional, “tarde o temprano también se cortarán las relaciones comerciales con esos países hasta ahora considerados socios y que han sido parte del sostén de la economía nicaragüense”.

Las valoraciones de este economista están basadas en un reciente informe titulado Perspectivas económicas de América Latina: Avanzando juntos hacia una recuperación, publicado en diciembre del 2021 por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).

En Nicaragua reina el caos

El documento plantea que la pandemia impactó a la región agravando sus principales desafíos estructurales, que han sido identificadas como las cuatro trampas del desarrollo.

Estas son: Baja productividad, desigualdades y vulnerabilidad social, debilidades institucionales y sostenibilidad medioambiental en riesgo.

A pesar de que los países latinoamericanos adoptaron rápidamente políticas bien orientadas para responder a la pandemia, ha sido la región más afectada del mundo en términos socioeconómicos, sostiene el informe.

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“Una recuperación debe pasar por la creación de un consenso entre ciudadanos con los diferentes actores, y por implementar las reformas pendientes necesarias para impulsar la recuperación, pero aquí en Nicaragua los actores económicos y sociales a están presos, reina el caos, el miedo, el autoritarismo, que se traduce en incertidumbre económica”, destaca el especialista financiero.

Diversos enfoques de recuperación

El informe de la CEPAL agrega que el impacto de la crisis ha sido asimétrico, debido a que ha afectado especialmente a los grupos más vulnerables.

La pobreza y la pobreza extrema han alcanzado niveles no observados en los últimos 12 y 20 años, respectivamente.

“No existe un único enfoque o solución que garantice una recuperación sólida, sostenible e inclusiva. Las características socioeconómicas de cada país y el impacto diferenciado que ha tenido la crisis, exigen la adopción de un enfoque adaptado al contexto específico”, apunta el estudio.

También destaca que “la movilización de recursos para la recuperación requerirá esfuerzos a nivel nacional y una mejor cooperación y coordinación a nivel internacional, especialmente en lo que respecta a la deuda pública”.

Datos relevantes del informe de la CEPAL

La crisis del Covid-19 reveló que los mecanismos de protección social en la región son insuficientes debido a la alta incidencia del trabajo informal, que afecta a más del 50% de los trabajadores.

Además, las brechas de género en el mercado laboral y la mayor presencia de mujeres en los hogares más pobres siguen siendo retos estructurales.

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La crisis también ha puesto de relieve la necesidad de mejorar la calidad y el acceso a los servicios públicos básicos, especialmente la salud y la educación.

La región es la que más días lectivos ha perdido en promedio a nivel mundial (un 70% más que en los países europeos y un 13% más que el promedio mundial), por la pandemia.

Esto representa un importante riesgo para el desarrollo del capital humano.

Avanzar en la protección social

Los programas de protección social en América Latina y el Caribe deben avanzar hacia sistemas que garanticen la cobertura universal, recomienda en sus conclusiones el informe de la CEPAL.

Vislumbra como algo fundamental mejorar los regímenes de protección social, tanto en lo que se refiere a la cobertura sanitaria como de las pensiones, en apoyo de las personas mayores.

Para mejorar las condiciones socioeconómicas de las mujeres, es esencial diseñar políticas para la recuperación con perspectiva de género y asegurar una redistribución más equitativa del trabajo.

Es importante implementar políticas que reduzcan brechas en educación y promuevan adquirir competencias entre la juventud para reducir la desigualdad de resultados y de oportunidades, indica el documento.

Empleos decentes y sostenibilidad

El principal reto de la región durante la recuperación es generar puestos de trabajo formales de calidad y garantizar sostenibilidad a largo plazo.

Se deben adoptar políticas más ambiciosas para mejorar las competencias de los trabajadores, lograr la transformación productiva y atraer inversiones sostenibles.

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Las políticas productivas deben promover innovación, modernización tecnológica y diversificación de la estructura productiva.

Con un uso menos intensivo de los recursos naturales, se deben fomentar inversiones más ecológicas, la economía circular y adopción de nuevas tecnologías.

Debe fomentarse el comercio intrarregional, favorecer la creación de cadenas regionales de valor y aumentar la participación en las cadenas mundiales de valor y sus flujos de inversión.

Además facilitar la conexión de las microempresas y las pequeñas y medianas empresas con el comercio internacional.

Ventajas de la integración

Una mayor integración regional podría reforzar la competitividad y la creación de empleo en sectores con alto potencial, plantea el informe.

El transporte, el farmacéutico, las energías renovables, la economía circular y la agricultura sostenible, son algunos de esos sectores.

La creación de grandes consensos entre los ciudadanos será crucial para avanzar en la ambiciosa agenda de reformas necesaria para impulsar la recuperación económica, recomienda el documento de la CEPAL.