El sacerdote a cargo de la Parroquia Santa Lucía de Ciudad Darío, de la Diócesis de Matagalpa, ofició este martes una misa enfrente del templo y otorgó la eucaristía a los feligreses en la acera detrás de una malla perimetral, ya que la Policía al servicio del régimen sandinista no permitió que estos entraran al templo.
Los fieles se reunieron a cantar “Cristo ten piedad de nosotros” en la breve misa que ofició el sacerdote Sebastián López.
“Bien hermanos, vayan a sus casas a mucha oración, tener mucha fe, pedir paz interior sobre todo al Señor que nos fortalezca y Él sea la solución de nuestra nación y que es el rey de reyes pueda dar buen desarrollo a nuestras vidas y a nuestra estabilidad humana”, dijo el sacerdote en su breve homilía.
«No están solos»
Luego de la bendición que otorgó el sacerdote al finalizar la misa, una feligrés exclamó desde la acera del templo: “No están solos, aquí está el pueblo Darío con ustedes”.
Luego los devotos gritaron en unísono: “Una iglesia sin cruz no es iglesia de Jesús, no hay que dejar la iglesia sola nunca, todo nos quitarán menos nuestra fe”.
El régimen de Daniel Ortega elevó la persecución y el asedio contra los sacerdotes en Nicaragua el pasado 1 de agosto en la Diócesis de Matagalpa, con el cierre de ocho radioemisoras católicas, entre ellas Radio Santa Lucía de Ciudad Darío y desde hace 13 días mantiene en “casa por cárcel” al obispo Rolando Álvarez y a otros religiosos y laicos ue le acompañan en la sede de la curia de esta localidad.
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