«Es posible que la gente salga a la calle pero va a ser gradual», es decir que la población se irá sumando poco a poco a las manifestaciones en contra del gobierno de Daniel Ortega, considera el sociólogo Cirilo Otero, pero no cree que haya un nuevo estallido social a como ocurrió en abril del 2018.
A pesar de que con los últimos acontecimientos en Nicaragua y los actos de protesta que ha hecho la población, en el país se percibe un ambiente de posible convulsión social, Otero se muestra dudoso de este panorama.
«Hace falta coordinación entre municipios, ciudades y demás territorios en donde se convoquen a manifestaciones amplias y nutridas» comenta y destaca que la última manifestación de jóvenes en la Universidad Centroamericana llamó su atención debido a que hubo un acercamiento mayor entre los manifestantes y los antimotines de la Policía Nacional.
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Pero para el politólogo José Antonio Peraza, un estallido social sí es posible, debido a las condiciones en las que se encuentra el país en términos económicos y políticos, que califica como «peores que el 18 de abril».
Según Peraza, un estallido social dependerá mucho de cuánto se avance en la búsqueda de una solución política a la crisis y la respuesta a las demandas de la población por parte de los gobernantes, en lo cual no hay muchos avances hasta la fecha.
«De lo que hay que tener claridad es que mientras no se regrese a las libertades y mientras no se respete la democracia, en Nicaragua no va haber estabilidad» destaca el politólogo.
Discursos bélicos de Ortega
De acuerdo a Otero, Ortega en su desesperación por lo sucedido con Evo Morales en Bolivia, lo ha llevado a cometer actos de «paranoia» y «torpeza», como los recientes discursos del mandatario en los que estaría llamando a la guerra en contra de los ciudadanos que manifiestan su descontento con la administración del caudillo sandinista.
Una apreciación similar tiene el exguerrillero del FSLN, Victor Hugo Tinoco, quien expresa que «Ortega está amenazando de muerte a todo el pueblo nicaragüense y eso es desesperación pura».
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Las actitudes violentas que puedan tomar algunos manifestantes serían una reacción a la violencia que reciben por parte de las autoridades policiales que se encargan de reprimir cualquier tipo de manifestación cívica, explica Otero.
«La sociedad nicaragüense está convencida que el mejor instrumento es la lucha cívica y la resistencia popular» considera el sociólogo.
«Si hubiera una intencionalidad de armarse y caer en un conflicto bélico ya hubiese sucedido» debido a que Ortega se esfuerza en arrastrar al país hacia ese escenario, y no quiere tratar de «entenderse» con la oposición y encontrar una salida pacífica a la crisis política del país, menciona Otero.
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Víctor Hugo Tinoco mencionó que el llamado a Ortega a usar la vía armada, no es más que el anuncio de una posible masacre.
“Él no tiene contra quien pelear. Él solo puede asesinar, él solo puede masacrar, pero no puede pelear una guerra contra nadie”, dijo el ex vicecanciller de la república al recordar que el pueblo nicaragüense se encuentra desarmado.
Foto principal: EFE
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Julián Sigfrido
noviembre 21, 2019 at 9:54 am
Para que esto se cumpla se necesitan dos condiciones: 1) Unidad de la oposición en una sola coalición y 2) organización de todo el pueblo en los territorios. Sin estás condiciones es muy difícil las protestas fuertes. La UNIDAD es la garantía.