Llorando estaba Nelson Jaciel Dávila Espinoza al encontrarse frente al juez en la audiencia inicial por el delito de parricidio en perjuicio de su hermano Moisés Antonio Dávila Espinoza, a quien privó de la vida con una estocada en el pecho.
El crimen ocurrió el pasado 6 de noviembre alrededor de las 7:30 de la mañana en el sector de El Naranjero, cercano al parqueo de El Novillo en el Mercado Oriental, ubicado en Managua.
De acuerdo a la acusación, a cargo de la fiscal Griselda Ibarra, los jóvenes se encontraban «bajo los efectos del alcohol» cuando surgió una discusión entre ambos. Nelson Dávila «sin mediar palabras», con un cuchillo que portaba en su mano derecha, «le propinó una estocada en la parte superior del pectoral izquierdo, cayendo la víctima».
La cuchillada le perforó órganos esenciales a Moisés Dávila.
«El dictamen médico legal posmortem estableció las causas de la muerte,la cual fue hemorragia interna intratorácica masiva, perforación cardíaca más laceración pulmonar izquierda, más hemoneumotórax izquierdo y herida por arma blanca corto punzante penetrante en el tórax», señaló el Ministerio Público durante la audiencia realizada el lunes 20 de noviembre.
El juez Rolando Sanarrusia, del Juzgado Sexto Penal de Audiencia de Managua, declaró que «existen indicios racionales suficientes para sostener una probable participación del acusado en el hecho», por lo que fue remitido a juicio oral y público el 18 de diciembre.
Se calculan al menos cinco casos de parricidio en el país en lo que va del año. Entre los recientes se encuentra el crimen de Jairo Amador Dávila, de 29 años, quien privó de la vida a sus progenitores el 8 de noviembre. El hecho ocurrió en el municipio de Siuna, en la Costa Caribe Norte.
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