El Parlamento Europeo volvió a abordar este martes la grave situación de Nicaragua bajo el régimen sandinista, en la que se calificó las votaciones del pasado 7 de noviembre como «una farsa» que busca legitimar en el poder a Daniel Ortega y a su esposa Rosario Murillo.
En este sentido, la inmensa mayoría de los eurodiputados que intervinieron no reconocieron dichas votaciones como tampoco a las autoridades electas.
Los parlamentarios fueron enfáticos al asegurar que Nicaragua vive bajo una dictadura, donde los aspirantes presidenciales son encarcelados, los defensores de derechos humanos reprimidosy donde no hay libertad de prensa ni expresión.
¿Cómo la «justicia de Ortega» ha actuado con un doble rasero en Nicaragua?
«Los actuales mandatarios no son ya los gobernantes legítimos del país, son usurpadores que merecen ser tratados como tales, sancionados y desposeídos del rendimiento económico de sus prácticas corruptas e investigados por sus políticas represivas en el marco del Consejo de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas», expresó la eurodiputada Izaskun Bilbao Barandica.
La caricatura del dictador Caribeño
Para el Alto Representante de la Unión Europea, Josep Borrell, «Daniel Ortega se ha convertido en la caricatura del dictador caribeño», y es «el espejo del dictador» Anastasio Somoza contra el que luchó.
Borrel también condenó los continuos ataques del déspota nicaragüense contra Europa, España y contra él de manera particular.
“Daniel ortega se ha expresado contra la Unión Europea y personalmente contra de su Alto Representante en los términos más violentos que uno pueda imaginar. Cada vez que le hemos criticado señalando objetivamente de qué forma se comportaba él y su gobierno, hemos recibido una respuesta contraria a las normas internacionales de buena conducta», manifestó Borrell.
«¡Qué tristeza ver como ha acabado el que una vez lucho por la libertad de su pueblo», subrayó.
¿Cuál será el rumbo de la economía nicaragüense tras la reelección de Ortega?
Indicó que a raíz de las votaciones del pasado 7 de noviembre Ortega atacó a España de manera despectiva, cruzando «una línea de decencia que nunca debería atravesarse» y recordó que también utilizó «términos insultantes contra los presos políticos deshumanizándolos completamente».
Insistió en que la UE ha sancionado funcionarios de Ortega y sigue trabajando con países socios para presionar más al régimen.
Foto: Cortesía
En este sentido, afirma que lo que se busca es la liberación inmediata de los presos políticos, el ingreso a Nicaragua de los organismos internacionales, la convocatoria a un diálogo y reformas políticas para que Nicaragua pueda salir de la oscura noche en la que está encerrada.
En sus intervenciones los eurodiputados insistieron en la necesidad de activar la Clausula Democrática del Acuerdo de Asociación (Ada) y por tanto sacar a Nicaragua de dicho acuerdo.
El eurodiputado Lopez Gil dijo que el Parlamento Europeo condena la instalación del autoritarismo en el país centroamericano y que al ser las votaciones del 7 de noviembre una “pantomima la UE «no reconoce a las autoridades emanadas de ella”.
También la eurodiputada Soraya Rodríguez, dijo que no se debe reconoce la farsa de votaciones como tampoco la legitimidad de las autoridades. Al respecto, pidió que se pongan en marcha los instrumentos de que dispone la UE y se sancione a Daniel Ortega.
Dijo que además de que se aplique la Clausula Democrática, también deben incrementarse los «mecanismos de protección a los defensores a los derechos humanos y periodistas que aun resisten en Nicaragua».
En relación a la ayuda humanitaria, dijo que esta debe seguir, pero que el financiamiento de la UE y de ninguno de sus Estados miembros no debe llegar «a manos de este régimen corrupto”.
Entre los eurodiputados, Ortega tiene admiradores, pocos, pero los tiene. Uno de ellos es Manu Pineda, quien dijo que a sus colegas les molesta que Ortega haya ganado las elecciones y que Nicaragua siga teniendo una gobierno al servicio del pueblo y no de las multinacionales».
Pero la mayoría de los parlamentarios fueron enfáticos condenando al régimen sandinista. Dita Charanzova, vicepresidenta del Parlamento Europeo, indicó que “no hacia falta una bola de cristal para saber el resultado de estas elecciones de antemano”.
«Ya es hora de enviar una mensaje político claro. No vamos a tener acuerdos con dictaduras tenemos que suspender el acuerdo con Nicaragua», manifestó.
Para el diputado Gabriel Mato la situación en Nicaragua es insostenible. «Pretenden extinguir la libertades y convertir a Nicaragua en un régimen autocrático, comunista de carácter personalista y familiar. No podemos quedarnos impasibles ante el desafío comunista que amenazan a muchos países latinoamericanos», advirtió.
Para el jueves se espera los eurodiputados voten una resolución para presionar más a Ortega y su régimen.
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