María Haydée Osuna convocó a una conferencia de prensa en la que negó haber pactado con el Frente Sandinista para lograr la expulsión de María Fernanda Flores de Alemán como diputada ante la Asamblea Nacional tal y como lo señaló la ex primera dama. Osuna más bien hizo una advertencia a su antigua aliada política; «Tengo ética y saben que los secretos, lo que yo sé como profesional me lo voy a llevar a la tumba», dijo de manera enfática, pero dejó entrever que hay una excepción a esta regla.
La veterana política dejó claro que no permitirá que calumnien a su familia y destacó para quienes sacan a luz acusaciones del pasado por narcotráfico contra su hermano que a veces es mejor «que se queden con el piquito cerrado».
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Flores ha acusado a Osuna de haber participado en actos de corrupción durante el gobierno de su esposo, pero Osuna no se fue a detalles, y se limitó a mostrar una fotografía gigante de la consumación del pacto Alemán- Ortega. «Yo no estoy aquí», dijo mientras era vitoreada por un grupo de simpatizantes que llegaron a engrosar la conferencia.
– «Hoy iniciamos una nueva época para el PLC «, anunció Osuna poco antes de dar la palabra al diputado Jimmy Blandón quien ofreció detalles sobre el proceso de «limpia» dentro del partido que por más de 20 años controló Arnoldo Alemán y su esposa.
«Ninguno quedó»
Jimmy Blandón fue categórico. Reconoció que la expulsión de María Fernanda Flores se viene planificando en secreto desde hace semanas, y que solo se manejó entre los diputados que eran fieles a Osuna.
Sin embargo, aseguró enfáticamente en que no pactaron con el FSLN a pesar de haber logrado todos los votos de la aplanadora sandinista en el plenario. Blandón dice que tomaron el riesgo y que si los oficialistas hubieran decidido no respaldar la propuesta, ellos estaban claros del destino que les esperaba.
Sin embargo, ahora que cantan victoria también anuncian haber tomado el control total del partido.
«Merecemos trabajar por una democracia y sacudirnos esa cúpula que ha venido desbaratando la institucionalidad», indicó Blandón en clara alusión a Arnoldo Alemán y sus más cercanos colaboradores, quienes arrastran por años la sombra del pacto con Ortega y un sin fin de acusaciones por corrupción durante una gestión presidencial que fue escrita en la lista de Amnistía Internacional entre las 10 más cuestionables de Latinoamérica.
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«Ya sacamos a toda la cúpula, ninguno quedó», anunció triunfante Blandón mientras recibía aplausos de los presentes. Según sus palabras, Osuna tiene la representación legal y presidencia del partido, así como el apoyo de todas las bases y a partir de hoy Alemán no tiene nada que hacer en el PLC ni puede usar las siglas y símbolos oficiales.
Sobre la calidad de presidente honorario que tiene Alemán en el partido, Blandón explicó que se hará un proceso de reestructuración, dejó abierta la posibilidad de una modificación a los estatutos que imponen al exmandatario en ese cargo e indicó que a partir de ahora serán las bases las que tomen ese tipo de decisiones.
También dejaron claro que Alemán y sus delegados no pueden representar al PLC ante la Coalición Nacional porque no tiene «legitimidad ni legalidad» y por lo tanto luego que terminen su proceso de reestructuración, analizarían si se integran o no a esta fuerza de oposición, que por su parte, define hoy si expulsa o no a ese partido de sus filas.
Finalmente anunció que los diputados Maximino Rodríguez y Miguel Rosales se salvaron del mismo destino de María Fernanda Flores, porque al parecer finalmente aceptaron la legitimidad de María Haydée Osuna y ahora se plegarán a esto que ahora dicen, prefieren que sea llamado «PLC por el cambio».
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