¿Dolarizar o recordobizar la economía? ¿Qué le conviene a Nicaragua?

El aumento constante en casi todos los productos que se compran, se debe a una serie de factores como la inflación, devaluación, los precios internacionales, contexto mundial, entre otros.

Durante muchos años los nicaragüenses han visto como su dinero se diluye en suspiros cada vez que les toca realizar las compras del hogar, peor caso, cuando se plantean una meta de ahorro para realizar mejoras en sus viviendas o adquirir bienes que para ellos son indispensables.

Nicaragua vive una dolarización de facto, es decir, los servicios y productos se venden a precios dolarizados, razón por la cual semana a semana suben pequeños centavos y por tanto usted termina pagando más por el mismo producto, muchas veces sin darse cuenta.

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El problema es que la mayoría de nicaragüenses devengan salarios en córdobas y sin mantenimiento de valor, diferente a lo que ocurre a las deudas que sí son beneficiadas con esta cláusula. En palabras más sencillas, en un lapso de tiempo el dinero rinde menos. Si antes compraba una tortilla en C$2, ahora pueden andar entre C$2.50 y hasta C$3, en otros casos se ha optado por reducir el tamaño.

Al final o paga más por el mismo producto o simplemente recibe una menor cantidad y aunque se debe a diferentes factores, si nos enfocamos en la devaluación, cuyo deslizamiento actual anda en el 2% con respecto al dólar. En unos años se puede estar pagando entre el 25% y hasta 75% por el mismo producto, en el caso de las tortillas.

¿Dolarizar la economía nicaragüense ante la inflación y el alza de precios?

Dolarizar una economía no es tan fácil, según el economista Marco Aurelio Peña, ya que se requiere de una serie de estudios en los que no solo deben participar las autoridades monetarias de gobierno, sino también economistas independientes, centros de pensamientos, – que ya no hay en Nicaragua tras el cierre de FUNIDES y otra organizaciones -, sociedad civil e instituciones financieras internacionales como el FMI, que brinden acompañamiento.

“Yo me atrevería a decir que antes de una dolarización es más conveniente ‘recordobizar’ la economía nacional, sería más beneficioso. Para poder llegar a cualquiera de esas decisiones se tiene que realizar una serie de estudios, así como ver los ejemplos de países que han experimentado esta situación como: El Salvador, Panamá, Ecuador, que son economías con rendimientos medianos y mejores que los de Nicaragua”, explica el economista.

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Si bien una dolarización permitiría ajustar los salarios en comparación a la compra de productos (ganar y pagar en dólares), la situación podría generar una serie de desventajas, por lo cual no es un decisión fácil de tomar y antes de pensar en ella, sería más factible recordobizar, una decisión que también requiere de mucho análisis.

¿Qué es cordobizar?

Recordobizar, implicaría, en palabras sencillas, que el córdoba sea la única moneda de curso legal, sacar del mercado los dólares, restringir su uso, pero en simultáneo, se debe generar confianza en el Córdoba a través de distintas medidas e incentivos, de modo que la población pierda el miedo latente que existe desde la debacle económica de los ochenta. Una tarea nada sencilla, pues el arraigo del dólar es fuerte en Nicaragua.

El debate de la dolarización total o la recordobización de la economía nacional no es un tema de ahora, sino desde hace años. En el período presidencial del presidente Enrique Bolaños se dio mucha importancia al tema, pero luego de ver los pro y los contra se optó mejor por bajar la tasa de deslizamiento de la moneda, y así se pasó de un 6% a un 5%.

En la misma encrucijada se encontró el gobierno actual, que llevó el deslizamiento a un 3% en 2019 y para 2021, ese mismo gobierno ubicó la tasa al 2%, que actualmente es la que se mantiene, misma que según el economista Marco Aurelio, fue la más óptima luego de varios estudios realizados.

“Se ha optado por conservar el régimen cambiario para estar en una zona de confort. Pero la principal crítica del régimen cambiario actual es que el córdoba está sobrevaluado, sobre todo si pasaramos a un régimen cambiario de flotación, el córdoba sería menos de lo actual”, expone Peña.

Una situación que hace que el país pierda competitividad. Los compradores de exportación tienen que tener más dólares para adquirir los productos, lo que hace que éstos sean más caros.

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Las desventajas de la dolarización absoluta, según el economista

• Se pierde política monetaria, el BCN no puede controlar la moneda porque no hay córdobas. En todo caso sería la Reserva Federal de Estados Unidos el ente regulador.
• Se pierde identidad territorial económica. Tu moneda representa tu país por su historia.
• Se queda a merced de las fluctuaciones del dólar a nivel internacional.

¿Es mejor la recordobización?

Si el tema es la recordobización, Peña lo ve más rentable, pero explica que también requiere de una serie de estudios detallados, reformas a nivel financiero y del Banco Central, así como de campañas de educación monetaria con la gente que aún conserva una fuerte desconfianza a la moneda nacional a causa de las crisis en la historia reciente.

“La desconfianza en el córdoba es tal que si te das cuenta cerca del 80% de los depósitos en los bancos siguen siendo en dólares. Para recordobizar y evitar un trastorno económico se necesita elevar la confianza del córdoba”, cuenta Marco Aurelio, quien nos deja las siguientes apreciaciones.

• Las regulaciones tienen que ser graduales.
• El dólar solo se debe restringir y no eliminar por completo.
• Se debe promover incentivos a las cuentas en córdobas para generar confianza en la moneda.
• Regular o revertir que los oferentes de servicios cobren en dólares. Ya ellos se benefician con la cláusula de mantenimiento de valor, no así los ahorristas.

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El tema de la dolarización o recordobización de la economía nacional es muy complejo, hasta el momento ningún gobierno ha querido dar ese paso, por temor a desequilibrios económicos y por la vasta influencia que muchos sectores financieros tienen, pues ellos son los más beneficiados con éstas medidas, mientras los ahorrantes y compradores asalariados son los que ven cada vez más reducido su dinero. El poder adquisitivo también baja.

Por el momento, no se ve de ningún modo que el gobierno y los sectores privados involucrados quieran realizar algún cambio. Por tanto el deslizamiento del 2% del córdoba respecto al dólar se seguirá manteniendo en esa zona de confort hasta que la situación se agudice y se tenga que correr con la “papa caliente” en las manos a buscar soluciones paliativas, en pocas palabras a buscar un “parche” como siempre se ha hecho en el país.