Expresentadora de Canal 13 aclara su relación con el gobierno

La expresentadora de televisión Suyén Cortez ha dado mucho de qué hablar en redes sociales luego de que concediera una entrevista a un canal de Youtube, en el que aseguró que al entrar a su anterior trabajo, el oficialista Canal 13, dejó de hacer periodismo y, por requisito del medio apostó por la viralidad haciendo a veces de «boba».

Cortez aclaró en su cuenta de Facebook que ella no se ha peleado con el gobierno y que sigue teniendo una buena relación con los dueños del Canal 13, los hijos de Daniel Ortega.

Según dijo, solo hablaba de su trabajo en un programa de farándula en el canal oficialista.

Cortez explicó que la confusión con sus declaraciones se debió específicamente a un capítulo de la entrevista. En ese capítulo confesó que en el canal «constantemente estábamos siendo evaluados». «Yo decía, cómo una mujer adulta como yo, que solo sabe hacer periodismo, pero no el ridículo, puede convertirse en viral. Entonces tuve que volverme no sé si la palabra es adecuada, pero tuve que volverme estúpida para volverme viral, porque era un requisito para quedarme en esta nueva generación, en la que prevalece la estupidez, porque la estupidez vende”, afirmó en la entrevista, agregando: «Me quité mi chaqueta de periodista y me puse la de bufón».

Extrabajadora del oficialista Canal 13: “Me quité mi chaqueta de periodista y me puse la de bufón”

En buenos términos

La expresentadora subrayó que «el contexto de toda la entrevista» era meramente «espiritual». «Ellos (los dueños del canal de Youtube) solo iban publicando capítulos y capítulos y justamente en un capitulo de esa entrevista yo expreso el malestar que yo empiezo a sentir cuando ya no me siento a gusto hablando mal de la gente en un programa donde hay un segmento de chismes», afirmó.

«Les voy a hacer franca. El hecho que ya no me guste estar involucrada en chismes, en esto, en farándula, en la manera nueva de hacer televisión, no significa que yo esté mal ni quiera emprender una guerra en contra del gobierno, porque al final y al cabo ellos me dieron la oportunidad de ejercer en sus medios, yo ejercí, hice mi trabajo bien. Me hice famosa, todo eso, y además de eso, cuando yo me fui, yo dejé las puertas abiertas, el dueño del canal (me dijo): ‘¿Estás segura que te vas?‘. ‘Sí, me voy‘. ‘¿Tenés tus motivos?‘ ‘Sí, tengo mis motivos».

Cortez aseguró que tiene buenas relaciones con el canal y que incluso los medios oficialistas le dan cobertura a sus «emprendimientos».

“Entonces, yo no estoy peleada con el gobierno, yo no tengo problemas con el gobierno, ni voy a permitir que tergiversen mis palabras para utilizarme para su guerra campal», aseguró.

Periodistas oficialistas piden sanciones para quienes se quejen de Ortega

Pidió a canal de youtube que borrara entrevista

Aunque afirmó que todo se trató de una tergiversación de sus palabras, Suyén Cortez dijo que pidió al canal de Youtube que la entrevistó que borrara la entrevista y que ni al mismo papa le daría una.

«Acabo de hablar con la dueña de ese canal de Youtube y le dije: ‘Fijate que no me gustó el desenlace de esta entrevista. Íbamos a hablar de Dios. La gente está tergiversando lo que vos hiciste, espero de buena fe, así que yo no quiero más esa entrevista en redes‘, y ella decidió borrar toda la entrevista y yo voy a hacer lo mismo con la mía. Y jamás ni que sea el papa que me pida una entrevista yo no la vuelvo a dar si no es en mis redes», manifestó.

«Hay gente que está esperando que yo me resbale en una cascarita para hacer leña del árbol caído y eso no va a pasar porque a los hijos de Dios todo nos va bien», reprochó la expresentadora.

Hijo de Daniel Ortega llama «delincuentes» a periodistas

Otros periodistas renunciaron en el 2018

Hay que apuntar que la familia Ortega Murillo controla varios canales de televisión como Canal 2, Canal 4, Canal 6 (estatal), Canal 8 y Canal 13, además de muchas radios y plataformas digitales.

Contrario a Cortez, que trabajaba en farándula, al iniciar las protestas antigubernamentales del 2018, varios periodistas oficialistas renunciaron a sus trabajos en protesta por la violencia ejercida por la Policía y los militantes del partido FSLN contra los manifestantes. Estos son tachados por algunos de sus excompañeros y fanáticos de Ortega de «traidores» y «vende patria».