A pesar de que estamos en el tercer trimestre del año 2020, el Banco Central de Nicaragua no ha publicado las cifras oficiales sobre la situación de las remesas, en medio de la crisis económica y sanitaria. De hecho, el informe más actualizado del BCN es el del segundo trimestre del 2019, en el que indica que las remesas recibidas del exterior ascendieron a 412.8 millones de dólares en comparación al primer trimestre de ese año, y significaron un incremento del 9.9% respecto a la misma fecha en 2018.
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Los principales países de donde vienen las remesas son Estados Unidos (56.0%), Costa Rica (17.5%), España (13.0%) y Panamá (5.2%), según los datos oficiales. Economistas han explicado que el incremento de las remesas en medio de la crisis económica se da como consecuencia de la crisis política, pues miles de nicaragüenses decidieron salir del país durante el conflicto social que estalló en 2018 y enviaban remesas a sus familiares.
La crisis económica afecta a nicaragüenses por tres años consecutivos.
Para el cierre de 2019, organismos como la Fundación Nicaragüense para el Desarrollo Económico y Social (Funides) proyectaron un ingreso de 1,600 millones de dólares de ingresos en concepto de remesas, lo que significaría un crecimiento cercano al 10%, cumpliendo con la tendencia de los últimos años.
Pandemia afecta remesas
El problema es que en 2020 con la pandemia del COVID19, los migrantes han caído en el desempleo y muchos han optado por volver a sus países origen. El Banco Mundial ha advertido que «la caída (mundial de la economía) proyectada, que será la más abrupta de la historia reciente, se debe en gran parte al desplome de los salarios y el empleo de los trabajadores migrantes, que suelen ser más vulnerables a la pérdida de puestos de trabajo y de salarios durante las crisis económicas de los países que los albergan”.
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Los nicaragüenses no son la excepción. En las últimas semanas cientos de connacionales han regresado a Nicaragua provenientes de países centroamericanos y del caribe tras perder sus empleos y verse en una situación del vulnerabilidad por el COVID19.
FUNIDES estimó en su informe de coyuntura de abril del 2020, que este año las remesas caerán entre 5.1% y 18%, lo que se traduce entre 84 y 297 millones de dólares que dejarán de ser percibidos por las familias nicaragüenses, dejando atrás el crecimiento alcanzado en 2019.
La caída podría ser incluso más abrupta si el nuevo coronavirus continúa azotando a los principales países emisores de remesas, y esto empeora mientras Nicaragua se acerca a una depresión económica debido a su tercer año en recesión, según las estimaciones de economistas consultados como Luis Murillo.
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El Banco Mundial también ha advertido que a nivel global las remesas podrían registrar una caída hasta de un 20% este 2020, como consecuencia del cese de actividades de algunas empresas y el desempleo al que han sido sometidos cientos de migrantes por la pandemia.
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