Nicas en Ucrania peligran al ser llamados por gobierno de Ortega, dicen analistas

El gobierno de Daniel Ortega anunció a través de Rosario Murillo, que «está pendiente» de la situación de 28 nicaragüenses que podrían requerir apoyo de algún tipo, en medio del conflicto bélico que se desarrolla en Europa. Las declaraciones de Murillo se realizaron cuatro días después de iniciada la invasión de Rusia a Ucrania, de la cual hasta el momento guardan silencio.

Sin embargo, los nicaragüenses podrían peligrar al ser contactados por el gobierno de Ortega, ya que Nicaragua no posee una sede diplomática en Ucrania, y estos peligros surgen cuando Rosario Murillo, mediante la Alba Azucena Torres, embajadora de Nicaragua en Rusia.

Gobierno de Ortega dice estar pendiente de nicas en Ucrania

Un diplomático nicaragüense experto en relaciones internacionales, que prefirió omitir su nombre por motivos de seguridad, expresó a este medio de comunicación que en casos como estos, el gobierno estaría exponiendo a sus nacionales a ser considerados, incluso, espías.

«Lanzar a los nicaragüenses en Ucrania al consulado en Moscú es un suicidio para ellos. Hay en una guerra, no están tirándose confites. Yo creo que esta gente no tiene ni la menor idea de lo que esto significa, y dicen cuatro tonterías», dijo.

¿Cómo deberían proceder?

Los nacionales nicaragüenses que estén en una situación de riesgo en Ucrania podrían solicitar ayuda a su país, acercándose a alguna de las embajadas más cercanas, exceptuando la rusa, debido al conflicto armado. Según el diplomático, los puntos recomendados para estas personas son: la embajada de Nicaragua en Ankara, Turquía, o al consulado general en Estambul. Porque son las más cercanas, después de Moscú.

«El consulado debería dirigirse las autoridades nicaragüenses para identificarlos y poder ayudarlos, si es que quieren hacerlo», menciona.

Entre las acciones que puede realizar el gobierno puede hacer para apoyar a los nicaragüenses que lo solicitan es apoyar gestiones para la salida del Ucrania, si es necesario, y también hablar con las autoridades locales para que las personas puedan abandonar el país de forma segura y sin ser detenidos.

En estas gestiones no interfiere si la persona está nacionalizada en Ucrania, porque también es nacional nicaragüense, «y sería algo por razones humanitarias y no política, en este caso estrictamente apegado a la Convención de Viena con relación consular».

Nicaragua tiene diferencias con Ucrania

Gran parte de los conflictos que existen hoy en día entre Ucrania y Rusia son debido a la Revolución de la Dignidad, o protestas de el Maidán en el año 2014, cuando Rusia anexó como parte de su territorio la península de Crimea, y como parte de su amistad con Vladímir Putin, Daniel Ortega autorizó en el año 2020 la inauguración de un consulado en Crimea la reunión fue encabezada por la embajadora en Rusia Alba Azucena Torres.

Serguey Aksionov, jefe de Crimea y Alba Azucena Torres (ambos al centro) junto a otros diplomáticos durante la inauguración de consulado en Crimea, 10 de noviembre del 2020. FOTO: El 19 Digital

Dicha situación generó descontento en los diputados ucranianos, y como consecuencia, el año pasado la Rada Suprema (el parlamento de Ucrania) aprobó sanciones sectoriales económicas, y otras restricciones contra ocho personas, entre ellos cuatro funcionarios de la dictadura sandinista, de los cuales se dieron pocos detalles, la razón: la apertura de dicha sede diplomática.

Desde entonces Ortega ha reconocido a Crimea como parte del territorio ruso, al punto de defender a Putin sobre sus acciones similares en Lugansk y Donetsk, dos regiones separatistas de Ucrania a las que Rusia también reconoció como independientes.