La audiencia de las siete personas que acompañaban en la Curia Episcopal de Matagalpa a monseñor Rolando Álvarez es catalogada de «clandestina y validada por un grupo ‘selectivo’ de ‘defensores’ públicos», por el bogado Yader Morazán.
En la audiencia, realizada el 22 de agosto por la jueza Gloria María Saavedra Corrales, titular del juzgado Décimo de Distrito Penal de Audiencias de Managua, estaban los padres los padres Ramiro Tijerino, Sadiel Eugarrio y José Díaz; el camarógrafo Sergio Cárdenas, Diácono Raúl Vega y los seminaristas Darvin Leiva y Melquin Sequeira.
«Esta audiencia se celebró por la tarde del lunes 22 de Agosto del 2022, en la única sala que conecta directamente a las celdas del Complejo Judicial de Managua (No.6), una vez que se había retirado el personal que sale a la 1:00pm», escribió Morazán en un tuit.
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Audiencia plagada de irregularidades
El abogado agrega que «las 7 personas fueron llevadas ahí con el rostro cubierto, y como era de esperarse, en esa encerrona no hubo resistencia para la formalización de la «detención» de 90 días para “complementar” actos de investigación, bajo una de las nuevas leyes de Ortega».
Explica que la Fiscalía no presentó argumentos sobre las razones por las que necesita más tiempo para realizar las investigaciones y mucho menos sobre indicios que sustenten los actos iniciales que deben ser complementados.
Después de 18 días en un limbo jurídico y traslado forzado para sacarlos de la jurisdicción que les toca, al fin se les celebró audiencia a los padres Ramiro Tijerino y José Díaz; el camarógrafo Sergio Cárdenas, Diácono Raúl Vega y los seminaristas Darvin Leiva y Melquin Sequeira
— Yader Morazán ⚖️ 🇳🇮 (@YaderMorazan) August 24, 2022
Señala que existe un «contubernio» entre la directora de la Defensoría Pública, Clarissa Ibarra y el presidente del Tribunal de Apelaciones, Ernesto Rodríguez, éste último, según Morazán, es quien baja «orientaciones a los defensores que cubrirán las audiencias» y quien también asigna a un «juez de ‘confianza’ que llevará el caso y toda la logística que implica desde manipular el sistema “aleatorio” para la asignación del expediente, como la autorización de eliminar la visibilidad para que el público no vea ni el expediente virtual».
El pasado 19 de agosto los siete miembros de la iglesia junto a monseñor Rolando Álvarez fueron sacados «con violencia» de la curia de Matagalpa, varios días después, se supo que el obispo se encontraba bajo el régimen de arresto domiciliario, mientras que los otros fueron trasladados hacia la cárcel conocida como el nuevo Chipote.
Yader Morazán explica que es desde el Poder Ejecutivo donde se planifica y se crean las condiciones para este tipo de casos.
«Estamos delante de un Estado que opera como mafia, y se confabula para sustraer a los procesados de su juez natural, mantenerlos en condiciones de desaparición forzada, sin comunicación con sus familiares o abogados, y sin derechos humanitarios o menos del debido proceso».
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