“Con un palo y una piedra maté a mi papá. Yo andaba bolo, estaba bebiendo con mi papá, y él no andaba dinero. Eso fue como a las siete de la noche”, confesó un poco aturdido, el sujeto Ismael Avendaño Vivas, de 35 años, después de darle muerte a su padre José Antonio Avendaño de 78 años, en la comunidad Olama del municipio de Muy Muy en Matagalpa.
Este crimen atroz que conmocionó a la opinión pública, se registró el pasado jueves en horas de la tarde, cuando el desalmado hombre le robó un dinero a su progenitor que era producto de un negocio que recién había realizado en esa zona. El sujeto al momento de la confesión se mostraba un poco desorientado.
La versión preliminar da cuenta que Ismael atacó a su padre por la espalda, asestándole varios garrotazos, luego que el anciano cayó al piso, lo remató con una piedra en la cabeza, acabando con la vida del campesino de forma casi instantánea.
La investigación policial revela que el móvil del parricidio fue el robo de 80 mil córdobas por la venta de una cosecha de manzana de frijoles, misma que le fue pagada a la víctima en efectivo.
El homicida fue capturado dos horas más tarde por agentes policiales, precisamente después que los familiares del anciano denunciaron el sangriento hecho.
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