El Foro Económico Mundial e IPU Parline ubican a Nicaragua entre los países con más avances en temas de igualdad de género a nivel mundial, sin embargo, los datos no reflejan la realidad de las mujeres nicaragüenses, según explican activistas y defensoras de derechos humanos.
En el Informe sobre la Brecha Global de Género 2022 del Foro Económico Mundial (en inglés: Global Gender Gap Report 2022), Nicaragua alcanza el puesto número siete del top 10, y a nivel latinoamericano es el país que está a la cabeza, muy por encima de Costa Rica, México, Argentina y Perú.
Los números parecieran mostrar que en Nicaragua todo está bien, que las mujeres tienen voz y voto al ejercer cargos públicos, que se ha avanzado en todos los temas de equidad de género como igualdad salarial, derechos sexuales y reproductivos, y que la violencia contra la mujer, así como los femicidios, han disminuido.
María Teresa Blandón lleva décadas en la defensa de los derechos de las mujeres, para ella, los datos de este organismo internacional solo son números, un indicador simple que apenas muestra “el sexo y la identidad de género de las personas”.
Top 10 de países con más avances en temas de igualdad de género a nivel mundial. Imagen: Foro Económico Mundial.
“Lo que pasa es que el Foro Económico Mundial lo sobredimensiona y al sobredimensionarlo lo distorsiona, lo que nos ofrece es sobre la base de un dato numérico, lo traspola a un concepto de igualdad y ahí está la trampa”, expone.
El país con mayor número de ministras a nivel mundial
En cuanto a los países con más mujeres ocupando diputaciones ante el Parlamento Nacional en 2022, Nicaragua (51,7%) se ubica en los primeros cuatro lugares junto a Nueva Zelanda, Ruanda y Cuba. En lo referido al número de ministras ocupa el primer lugar con 58,8%, por encima de Bélgica (57,1%) y Suecia (57,1%). Hasta febrero de 2023, la Unión Interparlamentaria (UIP o IPU Parline), una organización compuesta por parlamentos nacionales de todo el mundo, coloca al país centroamericano en el puesto tres con el mayor número de diputadas.
“Tras las elecciones generales de 2021, entraron en el Parlamento de Nicaragua más legisladoras que legisladores. Esto ha suscitado esperanzas de que mejoren los derechos de la mujer y la paridad de género en un país donde el aborto se prohibió en 2006. La violencia contra las mujeres y la pobreza siguen siendo algunos de los principales problemas del país”, detalla el Foro Económico Mundial.
Mujeres “no ejercen libremente sus roles”
La investigadora e integrante del observatorio ciudadano Urnas Abiertas, Olga Valle, alega que si bien hay una paridad de género en cargos públicos y de elección popular, las mujeres “no ejercen libremente sus roles” y que “la equidad de género no puede seguirse midiendo sin un adecuado análisis de contexto”.
“Estos datos no pueden leerse de manera aislada, es decir tan importante es llegar a los cargos como el ejercicio del poder político en la práctica. Porque por ejemplo, en el caso de Nicaragua aunque desde 2014 la paridad tiene rango constitucional, la verdad es que las mujeres en estos cargos no ejercen libremente sus roles, más bien son parte de una estructura donde las decisiones se toman de manera vertical desde el Poder Ejecutivo”, explica Valle.
Una postura similar adopta la feminista María Teresa Blandón, quien expone que se deben tomar en cuenta indicadores como los aparecen en la agenda 2030 de la organización de Naciones Unidas (ONU), como los derechos económicos, sociales, sexuales y reproductivos, además del empleo y la calidad de este.
“Que haya paridad en la participación de hombres y mujeres en el poder público no es suficiente para afirmar que en estos países hay avances en todas las dimensiones que tiene que ver con la igualdad y con la equidad. Para poder hablar de eso tendríamos que ocupar más indicadores… Es preciso combinar distintos indicadores y eso estamos lejos de resolverlo, o sea, que el Foro distorsiona el concepto y por eso lo que nos ofrece es una mentira, básicamente”, explica Blandón, del grupo feminista La Corriente.
Ortega agravó la situación de las mujeres
Contrario a los números del Foro Económico Mundial y de IPU Parline, ambas defensoras de los derechos de las mujeres concuerdan en que en Nicaragua ha habido un retroceso en este aspecto y es con la llegada de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo que la situación se agravó enormemente.
“Desde que Ortega regresó al poder hay retrocesos muy graves, uno de esos es que ha cerrado el espacio cívico y ha impedido a las mujeres organizarse, ha impedido a las mujeres expresar públicamente sus demandas, ha impedido a las mujeres y a toda la ciudadanía la libertad de expresión. Otro retroceso enorme que hemos tenido es que ha desbaratado el tejido social, ha cerrado más de tres mil organizaciones de la sociedad civil, incluyendo más de 200 organizaciones de mujeres”, denuncia María Teresa Blandón.
Desde 2018, el régimen de Ortega a Cancelado unas 3,290 oenegés, entre las que se encuentran organizaciones de mujeres, una de ellas es el grupo feminista La Corriente, al cual le despojaron de su personería jurídica y le confiscaron sus bienes hasta convertirlos en un centro de danza inaugurado por la dictadura el pasado 20 de febrero.
Una verdadera vergüenza que el Índice del WEF siga colocando a Nicaragua como el mejor país para ser mujer en Latinoamérica. Solo en el último mes 59 mujeres fueron despojadas de la nacionalidad, pero siguen celebrando el espejismo de la paridad en cargos públicos 🤡🤡 pic.twitter.com/i8qta9lUJr
— Olga Valle (@olgavallel) March 9, 2023
Olga Valle destaca los atropellos que han vivido las mujeres en los últimos años y explica que “resulta ofensivo decir que porque la mitad de los cargos públicos y de elección popular son ocupados por mujeres, existen avances en la equidad”.
Algunos de los atropellos que han vivido las mujeres en Nicaragua:
- Cierre de las comisarías de la mujer.
- Estigmatización a defensoras y feministas.
- Cierre de 212 organizaciones de mujeres.
- Detención arbitraria de más de 300 mujeres desde 2018.
- Disminución del alcance de la ley 779.
- Violencia.
- Femicidios, entre otros.
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Paridad de género en Nicaragua “es solo un espejismo”
“En Urnas Abiertas hicimos un análisis del ejercicio de poder político a nivel local, que devela una serie de patrones en las municipalidades. Uno de los principales es que el poder verdaderamente está siendo ejercido por secretarios políticos en su mayoría -seguido por jefes policiales- por lo que la llegada de mujeres en razón de 50-50 a cargos públicos y de elección popular ni siquiera implica que ellas ejercen el poder, la paridad de género es solo un espejismo en el sistema político nicaragüense”, explica Valle.
María Teresa Blandón, por su parte, resalta el aumento de la impunidad y ejemplifica con los 70 femicidios ocurridos en 2022, los 18 en lo que va de este 2023 y el intento de otros 100. Explica que de nada sirve que exista un gran número de diputadas, ministras y magistradas en la Corte Suprema de Justicia si todas las órdenes se toman directamente por pareja presidencial.
“El Estado no hace nada, no tenemos comisarías de la mujer que funcionen, la mayor parte de las denuncias por violencia sexual ni siquera llegan a la Fiscalía, es decir, la propia Policía las desestima, hay una impunidad creciente”, alega.
Olga Valle concluye que el régimen de Ortega “ha usado esta disposición para simular que les interesan los derechos de las mujeres pero sus políticas de Estado misóginas evidencian todo lo contrario”.
La feminista María Teresa Bladón dice que “nada tenemos que celebrar, el sexo de los funcionarios no se celebra, la identidad de género de los funcionarios no es lo que estamos reclamando, estamos reclamando que tengan un compromiso con la equidad de género, con los derechos de las mujeres, nada de eso tenemos”, concluye.
Nicaragua Investiga
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