«Caída» de Pérez Olivas es parte de una estrategia del régimen, asegura excarcelado

La remoción del comisionado general Luis Alberto Pérez Olivas como jefe de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como «El Chipote», es una estrategia del régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo para «mejorar la imagen» de la Policía de Nicaragua ante las investigaciones por crímenes de lesa humanidad, señaló el excarcelado político Marlon Sáenz, conocida como «El Chino Enoc».

LAPO, como lo conoce la «vieja militancia» a Pérez Olivas, «es perro fiel«, manifestó el sandinista histórico y actual desterrado de Ortega, quien conoce al verdugo de presos políticos desde los años 80.

«El cuento de que lo defenestraron es igual al de Omar Halleslevens y Néstor Moncada Lau porque un artista de ese tipo no lo van a sacar de Hollywood», dijo a este medio.

El excarcelado político indicó que «extrañamente» los cambios en la institución policial ocurren de forma seguida luego que, el 3 de abril pasado, las Naciones Unidas extendiera el mandato del Grupo de Expertos en Derechos Humanos sobre Nicaragua (GHREN), encargado de investigar los abusos cometidos en el país desde 2018 e identificar a los responsables.

«A partir de ese informe es que comienzan a hacer cambios de policías y poner mujeres. Por ejemplo cuando quitaron a (los comisionados generales) Juan Valle Valle y Luis Barrantes», considera Sáenz, quien se dio a conocer desde que dentro de las filas del FSLN empezó a criticar abiertamente a Rosario Murillo.

No saldrán de Nicaragua porque son perseguibles

Según «El Chino Enoc», la dictadura intenta «medio lavarle la cara a la Policía y decir que esa gente ya no pertenece al Estado y estructura policial. Igual (esos policías) no saldrán de Nicaragua porque son perseguibles en cualquier parte del mundo».

Entre los nombres que se barajan para sustituir al sancionado Luis Pérez Olivas se encuentra el del comisionado mayor Victoriano Ruiz, quien fungía como segundo jefe de Auxilio Judicial.

Victoriano Ruiz quiso hacerse el «policía bueno»

Al respecto, el excarcelado político Miguel Mendoza, quien pasó casi 600 días en el complejo policial, recordó los abusos de Pérez Olivas. «Se volaron al SAPÓN, cuyo carácter duro e inflexible lo conocimos de cerca en el Chipote. Nadie duda que ejecutaba con saña los encargos de torturas que le dictaban desde El Carmen», afirmó.

Sobre Victoriano Ruiz, Mendoza expresó que «quiso hacer de ´policía bueno´ante los presos políticos, pero no tenía capacidad de decisión y siempre se lavaba las manos».

Marlon Sáenz dijo sobre LAPO que «él no habla fuerte, pero toma decisiones fuertes». No duda que «puede mandar a matar. No lo decide él, pero él decide cómo se hace».