Inician proceso de investigación contra Monseñor Álvarez

La policía, al servicio del régimen de Daniel Ortega ha iniciado un «proceso de investigación» contra el obispo de Matagalpa, Monseñor Rolando Álvarez.

La policía acusa al obispo Álvarez de utilizar «medios de comunicación y redes sociales», para «intentar organizar grupos violentos, incitándolos a ejecutar actos de odio en contra de la población, provocando un ambiente de zozobra y desorden, alterando la paz y la armonía en la comunidad, con el propósito de desestabilizar al Estado de Nicaragua y atacar a las autoridades constitucionales».

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Según el comunicado de la policía, publicado este viernes en los medios oficialistas, el proceso de investigación contra el jerarca católico es «garantizar la paz y la seguridad ciudadana y que estos hechos no se vuelvan a repetir».

La policía «ha iniciado un proceso de investigación, con la finalidad de determinar la responsabilidad penal de las personas involucradas en la comisión de estos actos delictivos, de los cuales se ha informado al Ministerio Público y al Poder Judicial. Las personas investigadas se mantendrán en sus casas» se lee en el comunicado.

El proceso de investigación contra Álvarez se da solo horas después que Rosario Murillo, segunda al mando en el poder, amenazó al obispo sin mencionar su nombre. Aquí «hay leyes», no se deben «infringir las leyes, mucho menos cometer delitos» dijo la vocera sandinista.

Este mismo viernes dos diputados pertenecientes al partido de gobierno pidieron procesar ante la justicia al prelado. «Este señor Álvarez debe quedar claro que él no está por encima de la ley y con sus actitudes ha hecho que se le pierda el respeto y se le trate como a un político cualquiera» dijo el legislador Wilfredo Navarro.

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Por su parte Carlos Emilio López, otro diputado leal al FSLN, publicó en sus redes sociales un mensaje contra el religioso. «Los falsos sacerdotes violan la Ley de Dios, que la ley del amor al prójimo, y violan la leyes terrenales que garantizan la paz, la democracia, la tranquilidad y el orden público» escribió.

Esto se da en el contexto en que el régimen Ortega-Murillo ha cerrado en la última semana siete radios bajo la administración de la Diócesis de Matagalpa, y luego de más de una semana de constante asedio contra la Iglesia católica.