El obispo auxiliar de la arquidiócesis de Managua, Silvio Báez, demandó en esta víspera de Navidad, la liberación de los más de 200 presos políticos que se encuentran en las celdas de los distintos sistemas penitenciarios del país.
“En las vísperas de Navidad, en que festejamos la humanidad y la ternura de Dios pido, ruego, suplico a quienes gobiernan en Nicaragua. ¡Liberen a los presos políticos! ¡Alivien un poco el dolor de sus familias y del país!”, expresó vía Twitter.
En las vísperas de Navidad, en que festejamos la humanidad y la ternura de Dios pido, ruego, suplico a quienes gobiernan en #Nicaragua: ¡Liberen a los presos políticos! ¡Alivien un poco el dolor de sus familias y del país! ¡Ustedes mismos, regálenle un poco de paz a su corazón! pic.twitter.com/xv2o8WnQwZ
— Silvio José Báez (@silviojbaez) December 23, 2022
Báez instó al régimen a aliviar un poco su culpa interna por todas las atrocidades cometidas en los últimos años en contra del pueblo de Nicaragua.
“¡Ustedes mismos, regálenle un poco de paz a su corazón”, aconsejó.
Régimen aumentará impuestos a bebidas alcohólicas y cigarrillos
El jerarca de la iglesia católica, desde el exilio en Estados Unidos, en reiteradas ocasiones ha clamado por la liberación de los sacerdotes, el obispo Rolando Álvarez y los demás presos políticos.
Hace unos días, convocó a la feligresía católica en Nicaragua a rezar el rosario a la “Madre de Dios”, para que intercediera por la liberación de monseñor Rolando José Álvarez.
“La sotana no hace santo a nadie” asegura el dictador Ortega
Recientemente Ortega confirmó su incredulidad a los obispos de la iglesia católica llamándoles “fariseos” y recalcó que “¡la sotana no hace santo a nadie!”.
En referencia a los ataques en contra de la Iglesia católica, monseñor Báez pidió a Dios por una iglesia en Nicaragua que anuncie el evangelio con valentía, “libre de miedos e intereses mundanos”, ha dicho ante la persecución que viven los sacerdotes, obispos y miembros de la Iglesia Católica en Nicaragua.
Baéz durante el rezo del rosario desde el exilio en Miami, también propagó que “los tiranos de hoy son como pilatos” porque son “cínicos y crueles” y a la vez “miedosos e injustos”.
Organismos de derechos humanos han expresado que el régimen de Ortega – Murillo mantiene como presos políticos a unas 235 personas, entre ellos también se encuentran sacerdotes, periodistas, y el obispo de Matagalpa, Rolando Álvarez.
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