El pasado 13 de febrero Henry Javier Molina García de 31 años, asesinó a una adolescente de 16 años identificada con las iniciales J.C.C.J. Molina Castro abusó sexualmente de la menor de edad, la estranguló y posteriormente quiso simular un suicidio colgando el cuerpo de la adolescente a una viga. El hecho ocurrió en la comunidad de Umbila, jurisdicción del municipio de Rosita en la Región Autónoma de la Costa Caribe Norte.
Familiares de Molina García sospecharon de la situación e inmediatamente intentaron capturarlo, sin embargo, este huyó hacia la montaña. Grupos de personas se organizaron para realizar su búsqueda que tuvo resultados exitosos, y lo tuvieron bajo custodia hasta que lo entregaron a la Policía, sin embargo, este hecho era sólo la punta del iceberg.
«El cuerpo examinado por médicos forenses del Triángulo Minero dictaminó la causa de la muerte: asfixia mecánica por ahorcamiento», dijo el comisionado Óscar Alemán, sub jefe policial del Triángulo Minero, el pasado 15 de febrero, cuando presentaron a Henry Molina como el principal sospechoso. Tras esclarecerse el asesinato de esta adolescente, los familiares de la víctima no dudaron en informar a las autoridades de sus sospechas hacia Molina.
Asesinatos en serie
Pero el escepticismo llegó el pasado sábado cuando un grupo de médicos forenses, y policías que custodiaban a Henry Javier Molina García llegaron a la vivienda que habitaba, y el homicida señaló lugares específicos donde encontraron otros tres cuerpos de personas que el sujeto asesinó en meses anteriores.
Henry Javier Molina Castro habría confesado los otros homicidios a la Policía.
Eloísa Blandón Cruz tenía 11 años de ser pareja de Henry Molina. Ella relató a la oficialista Radio La Primerísima que los cuerpos encontrados el pasado 26 de febrero fueron de otros familiares de ella, incluidas su hermana e hija.
Nicaragua registró 71 femicidios en 2021
Blandón mencionó a dicho medio de comunicación que en septiembre del año 2021 su hermana, Petrona Blandón Cruz de 32 años, y su sobrino de 12 años, desaparecieron repentinamente. En esa primera ocasión, Molina afirmó que se habían ido de la zona, y así lo hizo parecer.
Un mes después, la hija de Eloísa Blandón desapareció de forma súbita al igual que las otras dos personas. «Cuando se perdió mi hija, él dijo que ella se había ido con su novio, (pero) no sospechamos de él porque tenía 4 años de estar en la religión”, exclamó la mamá de la víctima a La Primerísima.
Actualmente Henry Molina García está a la espera de juicio, y hasta donde se ha logrado conocer, el Ministerio Público de la zona ha solicitado ampliar el plazo para continuar investigando el caso.
You must be logged in to post a comment Login