La inestabilidad política de Nicaragua sigue cobrando factura a la economía del país, esta vez quedará fuera de una parte del transporte comercial entre Costa Rica y El Salvador, ya que el 10 de agosto iniciará operaciones el nuevo ferri que evitará que productos del comercio bilateral pasen por Nicaragua.
Hasta ahora los productos comerciales de ambas naciones debían pasar por tierras hondureñas y nicaragüenses, lo que elevaba los costos por la tardanza en los puestos fronterizos e incluso los cierres de las fronteras, especialmente en la parte de Nicaragua, que desde 2018 entró en una grave crisis política afectando el transporte terrestre.
100 furgones
“Estamos a un paso de tener ferri entre El Salvador y Costa Rica, lo estamos anunciado porque ya el barco está en su travesía, fue adquirido por la empresa Blue Way, es una empresa panameña con inversionistas alemanes y hondureños”, anunció el pasado jueves, Federico Anliker, presidente de la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma de El Salvador (CEPA).
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Anliker explicó en el programa salvadoreño Frente a Frente TCS, que la embarcación “es un ferri de 175 metros de largo con capacidad para 100 furgones enganchados, o sea, su cabezal con el furgón de 40 pies”.
“Tanto, El Salvador como Costa Rica nos hemos puesto de acuerdo para bajar tarifas», dijo el funcionario salvadoreño, desacando el papel de «facilitadores para que los precios» sean bastante accesibles y atractivos.
De 6 días a solo menos de un día
Según la explicación del presidente de CEPA, el barco tardará entre 16 y 17 horas en llegar de un puerto a otro y en esta primera etapa transportará una buena parte de los productos comercializados entre ambas naciones y en una segunda se incorporarán pasajeros con fines turísticos.
El ferri tiene capacidad para 200 pasajeros, con 73 cabinas de 2, 3 y 4 literas, áreas comunes que incluyen restaurante de autoservicio y red de internet inalámbrica.
Según Alejandro Vargas, director de proyectos de Transmares de Costa Rica, empresa a cargo del nuevo ferri, el tráfico entre Costa Rica y El Salvador vía terrestre cruzando las fronteras, “se estaba durando aproximadamente 5 a 6 días si le va bien al chofer, si no hay cierres de fronteras o hay largas filas para el cruce de fronteras”, es decir, la reducción de tiempo es bastante significativa.
“Estamos pasando de ocho aduanas, cuatro aduanas dobles a dos aduanas, que nada más sería la salida de El Salvador y la llegada a Costa Rica… estamos pasando de cinco días a un tiempo más o menos estimado de 18 a 20 horas de trayecto”, expresó Vargas a Noticias Repretel de Costa Rica.
El ministro de Obras Públicas y Transportes de Costa Rica, Luis Amador, detalló que el ferri “mejorará la competitividad de ambos países a nivel regional, al establecer una nueva ruta de exportaciones e importaciones”.
Horarios de salida de los puertos
En un comunicado de prensa el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) de Costa Rica, informó que el servicio será los lunes a las 11:00 a.m. y los jueves a la 1:00 p.m. desde El Salvador y desde Costa Rica será los martes a las 6:00 p.m. y los viernes a las 8 a.m.
En otra comparecencia ante medios de comunicación, el representante de Transmares explicó a la cadena de noticias CNN que las tarifas hacia un solo destino van desde los $1,145 a los $1,360 por unidad completa (cabezal y remolque, incluyendo el conductor).
Alejandro Vargas estimó que el recorrido es de 360 millas náuticas en el buque de la corporación panameña con socios alemanes Blue Way, representada en Costa Rica por Transmares. La embarcación fue construida en Alemania y está diseñada para carga rodada y pasajeros, con carriles de 3 metros de ancho y altura de 4,80 a 5 metros.
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Esquivar Nicaragua
En cuanto los temas de inestabilidad política en Nicaragua, el funcionario salvadoreño Federico Anliker explicó en la entrevista del jueves 27 de julio, que el proyecto tiene 30 años y dejará menos huella de carbono, menos congestionamiento en las aduanas y reducirá el tráfico que se ve afectado en las vías nicaragüenses.
Agregó que el tránsito va a fluir, pues no se vería afectado como en la vía terrestre, sobre todo por el impacto que tienen los problemas geopolíticos “que se han visto o que se pueden avecinar del lado de Nicaragua, cuando han cerrado aduanas, o fronteras”.
Datos del Instituto Costarricense de Puertos del Pacífico (INCOP), demuestran que más del 95% del comercio en Centroamérica utiliza el transporte terrestre a través del Corredor Pacífico, cuyo estimado de transacciones intrarregionales que supera los US$ 9.745 millones, por lo que con esta opción se inicia “un nuevo corredor centroamericano”.
Entre El Salvador y Costa Rica lo que más se exporta son productos de higiene: papel higiénico, toallas sanitarias, jabón, productos alimenticios y para el sector construcción.
Con esta nueva vía comercial que llevaba años en ideas, Nicaragua queda fuera de la antigua ruta de los salvadoreños y costarricenses, por lo que los ingresos en materia aduanera podrían mermar para el régimen dirigido por Daniel Ortega y Rosario Murillo.
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