El Consejo Supremo Electoral (CSE), dio a conocer el lunes el primer informe sobre los resultados de los comicios municipales, asignándole la mayoría de alcaldías al Frente Sandinista.
El informe preliminar del órgano electoral incluye 112 de los 153 municipios del país.
Brenda Rocha, presidenta del CSE, declaró que «la voluntad de la ciudadanía fue expresada en las urnas de manera transparente, democrática y en paz”, a pesar del 82.7% de abstención según Urnas Abiertas.
«Hemos concluido con éxito un ejercicio cívico y soberano», afirmó Rocha en una rueda de prensa que ofreció 12 horas después del cierre de la votación del domingo y sin precisar el nivel de participación ciudadana.
En municipios históricamente opositores al FSLN, el partido gobernante obtuvo más del 70% de los votos, como en el caso de San Sebastián de Yalí, alcaldía que meses antes fue tomada por la fuerza por autoridades sandinistas.
Hasta el cierre de esta edición los denominados partidos colaboracionistas del régimen esperaban obtener al menos una municipalidad, pero la dictadura de Daniel Ortega continuó avanzando en su pretendido plan de partido único.
Proceso electoral marcado por “coacción del voto, violencia política y noticias falsas”
Los comicios estuvieron marcados por las detenciones arbitrarias, la represión y la falta de participación ciudadana desde el inicio de la campaña electoral.
Los sandinistas controlaban en el último periodo (2017-2022) 141 de las 153 alcaldías en juego y sumando otras tres en poder de la oposición cuyos ediles fueron sustituidos por miembros de ese partido.
En ese contexto, los dirigentes de oposición creen que el resultado electoral «consolidará» el poder Ortega con el l control casi total de los gobiernos locales.
Más de 3,7 millones de nicaragüenses mayores de 16 años fueron convocados para elegir a alcaldes, vicealcaldes y concejales en los 153 municipios del país, en un proceso que la oposición calificó desde el exilio como «una farsa».
Oposición rechaza «farsa»
El FSLN participó en estos comicios junto a cuatro partidos derechistas que la oposición tilda de «colaboracionistas» y un partido indígena de las dos regiones del Caribe.
Según el bloque opositor Unidad Nacional Azul y Blanco, con su cúpula en el exilio, Ortega realizó «esta farsa municipal para afianzar su control absoluto» en el país.
Nicaragua rumbo al “partido único y familiar”, señalan expertos
En la previa de las votaciones, la oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas (OACNUDH) expresó «preocupación» por denuncias sobre presuntas detenciones de al menos ocho personas durante el proceso electoral.
Mientras que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) lamentó el viernes «la falta de condiciones mínimas» para «la realización de elecciones libres» en Nicaragua.
Nicaragua Investiga
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