Con el resultado preliminar del Consejo Supremo Electoral (CSE), que le adjudicó a la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo todas las alcaldías de los 153 municipios de Nicaragua, se consolidó unas “elecciones a la cubana” y se materializó el “sistema de partido único”, coinciden expertos consultados por Nicaragua Investiga.
“Se ha consolidado y materializado el sistema del partido único en virtud del otorgamiento de todas las alcaldías. También se consolida el régimen totalitario”, asegura Juan Diego Barberena, miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB).
En estas votaciones municipales, el Frente Sandinista participó controlando 141 alcaldías de todo el país, las cuales 135 fueron asignadas por el CSE en las municipales de 2017; pero otras seis fueron arrebatadas a partidos opositores mediante la violencia entre 2020 y 2022.
Arturo McFields, exembajador de Nicaragua ante la OEA, opinó por su parte que las municipales fueron unas “elecciones a la cubana”, y que la dictadura sandinista marcó un nuevo récord al quedarse con las 153 alcaldías en todo el país.
“Sin competencia, con 82.6% de abstencionismo, más de 1,000 candidatos fantasma y más 220 nicaragüenses bajo cárcel y tortura en El Chipote”, escribió McFields en su cuenta de Twitter.
“El partido del terror”
Pero otros opositores al régimen, explican que no se consolidó el sistema único en el país porque desde antes de las municipales demostró tener un control bajo la violencia política.
“No se puede decir que el FSLN se ha convertido o se ha consolidado como partido único, se ha consolidado como el partido del terror, de las amenazas, de las torturas, la violencia, la agresividad y la restricción total hacia la población y su propia gente”, señaló Ana Quirós, integrante del Consejo Político de la UNAB.
Barberena también opina que se consolidó “el régimen totalitario”, que controla cada uno de los espacios políticos y sociales del país. “Con el control del 100% de las alcaldías del país, pretende generar mayor coerción, mayor vigilancia, mayor violencia política”, agregó.
Un partido familiar
El analista político José Dávila Membreño comenta por su lado que el régimen dio un paso más hacia cerrar su sistema político totalitario, “en que no hay opciones distintas a la que impone por la fuerza, la imposición y la arbitrariedad el grupo de poder que maneja el país a su antojo”.
También señaló que estas “llamadas elecciones municipales dejaron clara la imagen de la existencia de un partido familiar hegemónico, que ha seguido hasta hoy el modelo que hubo en Europa del Este de un partido hegemónico con grupos satélites a su alrededor para aparentar pluralismo y democracia”.
“Pero con este nuevo paso de adjudicarse todas las alcaldías en supuesta competencia, se ve más bien la intención de imponer el sistema de partido único tipo Cuba o Corea del Norte, pretendiendo condenar para siempre el pluralismo y la libertad de escoger entre distintas opciones”, apuntó Dávila Membreño.
You must be logged in to post a comment Login