Este 6 de febrero, Kevin Solís, conocido como «Murdock», cumplirá un año en prisión, tras haber sido condenado a cuatro años y seis meses de encarcelamiento, por el supuesto delito de robo agravado en perjuicio del simpatizante sandinista José Leonel Suazo Gutiérrez quien se infiltró en una protesta antigubernamental en la Universidad Centroamericana (UCA).
Desde entonces el caso de Solís ha sido uno de los más sonados en Nicaragua por las presiones y denuncias de torturas a la que es sometido, de acuerdo a denuncias de sus familiares. Su abogada ha señalado que las agresiones al joven han causado que este se encuentre en un estado de disociación con el entorno que lo rodea. Incluso, el Grupo de Trabajo sobre la Detención Arbitraria de las Naciones Unidas exigió la liberación inmediata para el joven.
Detención arbitraria y agresión
Según el Grupo de Trabajo, la privación de libertad de Solís fue arbitraria conforme a las categorías I, II y III. Primero, no hubo flagrancia delictiva y el arresto fue realizado por individuos vestidos de civil, sin que se presentara una orden de arresto expedida por un juez o por autoridades competentes.
Segundo, la detención fue resultado del ejercicio de sus derechos a la libertad de opinión y de expresión, así como a la libertad de reunión y asociación pacíficas. Tercero, porque en su proceso judicial le fueron denegadas las garantías esenciales del debido proceso, se lee en la información del organismo internacional.
«Hoy he sabido que a Kevin Solís, mi sobrino, lo han golpeado, que sigue estando en máxima seguridad. Kevin ejerció derechos fundamentales y ha sido secuestrado, enjuiciado y torturado», escribió en su cuenta de Twitter Azahalea Solís, el primero de enero de 2021.
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Ausencia de los presos políticos en la agenda nacional
La Unión de Presas y Presos Políticos de Nicaragua (UPPN), exigió mediante un comunicado más beligerancia a los grupos opositores para poner el foco de atención en los reos políticos y las víctimas de abril de 2018. Allan Gómez, miembro de la Junta Directiva de dicha asociación, dijo a Nicaragua Investiga que los bloques opositores no abordan el tema de los presos políticos con la emergencia que merece, pese a que son un canal de diplomacia para la comunidad internacional y dan a conocer la realidad que vive el país.
«Recientemente lanzamos una campaña en diciembre, pero no tuvo el alcance esperado ni las respuestas que se obtuvo en el 2019, que fue la libertad de algunos presos políticos. Y esto es porque el tema de la libertad de los presos políticos no se está poniendo como primera necesidad o un reclamo de parte de estas víctimas de los familiares», indicó Gómez, y destaca que no hay un pronunciamiento verdadero por parte de los bloques opositores y más bien se han quedado en un discurso político.
«Lo pudimos observar en la última resolución de la OEA (Organización de los Estados Americanos) en donde el tema de los presos políticos se tocó como uno de los puntos de agenda y no como punto importante para poder avanzar hacia cualquier temática de agenda política de Nicaragua», dice Gómez. Él considera que esto afecta a los presos políticos porque la comunidad internacional se lleva una impresión de los grupos de oposición sobre qué temas son de urgencia en el país.
Un manifestante pidiendo la liberación de los presos políticos en Tipitapa. MAYNOR VALENZUELA / AFP
Yaritza Mairena, quien también forma parte de la UPPN, acota que sienten abandono por parte de plataformas opositores en el tema de los presos políticos. Ella asegura que si se presta atención a las declaraciones que han brindado en las últimas conferencias de prensas, solamente mencionan temas electorales y plan de nación.
«No ven realmente los problemas que afectan a la ciudadanía o lo que está afectando el día a día», dice Mairena. Ella espera que las organizaciones opositoras tomen en cuenta el tema de los presos políticos.
El chantaje psicológico que viven los presos políticos en Nicaragua
«Por eso nosotros hacemos ese llamado a los grupos de oposición que son aquellos que llevan la voz a la comunidad internacional a que toquen estos temas con mucha más urgencia y le den la importancia necesaria, porque estamos hablando de personas en las condiciones que se encuentran en las mazmorras del régimen», dice Gómez.
Además ejemplificó los casos de don Justo Rodríguez, quien estuvo postrado en una cama en el Hospital Lenin Fonseca a causa de una golpiza que recibió en ‘La Modelo’. «Tuvimos el caso de Eddy Montes que perdió la vida adentro. ¿Y qué va a pasar cuando los presos políticos se levanten o tengan medidas extremas? «, se preguntó.
Más de cien presos políticos mantiene el gobierno de Ortega en las cárceles de Nicaragua. Muchos de ellos han sido víctimas de chantajes y presiones psicológicas por parte de las autoridades penitenciarias. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) constató mediante un informe que el tratamiento de estas personas son como objeto de intercambio y negociación con la finalidad de mantener en incertidumbre y angustia a sus familiares.
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