El Consejo Supremo Electoral (CSE) «ha manipulado la información reportada por los Consejos Electorales Municipales (CEM)», revela un reciente informe presentado por Unas Abiertas.
A esa conclusión llegó el organismo luego de analizar actas de escrutinios y carteles de los resultados oficiales brindados por el Poder Electoral sobre las municipales del pasado 6 de noviembre en Nicaragua en donde el partido gobernante FSLN se adjudicó las 153 alcaldías del país.
El informe subraya que en varios casos el CSE ha informado una mayor cantidad de votos que los reportados por los CEM al momento de los cierres, sobre todo para los partidos calificados de «colaboracionistas», lo que demuestra que manipulan los datos con la intención de asignarle determinadas concejalías a sus partidos satélites, así como para incrementar el reembolso que recibirán, todo como recompensa de su participación en un proceso carente de garantías. Los votos habrían sido inflados en algunos casos hasta 10 veces.
Para explicar cómo se consumó la apropiación de las alcaldías, Urnas Abiertas devela que los territorios que han sido históricamente antisandinistas vivieron una jornada electoral municipal bajo tensión, amenazas y una serie de irregularidades que se registraron desde la apertura de las urnas.
El estudio considera asimismo que la estrategia ¨fraudulenta del FSLN para arrebatar esas alcaldías también se expresó en las urnas y estuvo marcada por doble o múltiples votos en la misma JRV, a cargo de sus operadores que estaban dispuestos a hacerlo».
Agrega que además se extendieron constancias de personal auxiliar que le permitiría al portador votar en una Juntas Receptora de Votación, (JRV), diferente por encontrarse “movilizado”, lo que facilitó el voto múltiple, igual que en 2017 cuando se empleó esa misma táctica a través de un carnet amarillo que les acreditaba como “personal auxiliar”.
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También se registró el acarreo de personas para votar en diferentes JRV, especialmente con el traslado desde las zonas rurales.
El estudio encontró igualmente la eliminación de más de 1 millón 300 mil personas del padrón electoral, lo que permitío usar la táctica del “ratón loco”. Cuando una persona opositora no aparecía en el padrón le indicaban dirigirse a otro Centro de Votación (CV) mientras que a sus simpatizantes les permitían votar en ese CV.
Las actas de escrutinio fueron manipuladas, se inflaron datos, en promedio los reportes indican que en las actas se colocó hasta un 30% de votos adicionales, según el informe.
Datos del CSE no coinciden con lo vistos en lo CV
El CSE, por su parte, en su informe publicado el 11 de noviembre en el diario oficial La Gaceta concede el 100 por ciento de las alcaldías del país al FSLN. El informe del Poder Electoral registra supuestamente un total de 2 millones 108 mil 03 votos válidos, con una supuesta participación ciudadana de 57.09 por ciento y una abstencionismo de 42.51 por ciento.
Urnas Abiertas, no obstante, considera los resultados oficiales de los pasados comicios como una farsa electoral debido a que su juicio en la contienda no se dieron las condiciones democráticas y tuvieron una pírrica participación ciudadana de apenas el 17. 33 por ciento.
Nicaragua Investiga
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