Rodrigo Chaves, presidente electo de Costa Rica, declaró sus intenciones de nombrar un embajador de Costa Rica en Nicaragua, puesto que lleva cuatro años vacante.
En su primera rueda de prensa luego de ganar la segunda vuelta de las elecciones del vecino país el domingo pasado, Chaves justificó su decisión de llenar el puesto aduciendo que Nicaragua y Costa Rica no están en guerra y mencionando otras cuestiones prácticas.
«¿Qué es eso de que no hay embajador?» preguntó retóricamente Chaves.
¿Qué postura esperar del gobierno de Rodrigo Chaves de Costa Rica respecto a Nicaragua?
«Fíjese en Ucrania y Rusia que están dándose balazos, destruyéndose uno al otro y todavía están conversando» añadió. También aclaró que tener conversaciones no es un «endoso moral» y que, «cuando expulsen a Nicaragua de la OEA, ahí sí tendríamos que pensar» en remover al embajador.
El puesto de embajador costarricense en Nicaragua quedó vacante en 2018, año de la crisis sociopolítica generada por la represión gubernamental, al renunciar al puesto Eduardo Trejos para asumir otra jefatura. Costa Rica desconoció las votaciones de noviembre de 2021 en las que Daniel Ortega perpetuó su mandato ante las críticas y señalamientos de fraude de la oposición y la comunidad internacional.
Aunque algunos expertos y analistas han expresado preocupaciones ante un posible acercamiento entre Chaves y Ortega, el presidente electo de Costa Rica argumenta que la restitución del embajador responde a cuestiones prácticas.
«Esas posiciones de verse bonito no son la manera en la que nosotros queremos operar» manifestó Chaves. «Nosotros queremos operar de acuerdo al derecho internacional y al interés de los costarricenses».
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