Ortega nombra a Ricardo Coronel Kautz miembro del consejero directivo del Banco Central

Daniel Ortega continúa removiendo de los cargos a sus funcionarios leales. Este jueves le quitó los poderes a Tirso Celedón Lacayo, quien había sido nombrado tres meses atrás miembro propietario del Consejo Directivo del Banco Central de Nicaragua, y en su lugar nombró a Ricardo Coronel Kautz, según dos acuerdos presidenciales publicados hoy en La Gaceta.

“Nómbrese como Miembro Propietario del Consejo Directivo del Banco Central de Nicaragua al compañero Ricardo Coronel Kautz, en sustitución del compañero Helio César Montenegro Díaz”, reza uno de los acuerdos presidenciales.

Ricardo Coronel Kautz es una figura muy ligada al Frente Sandinista desde hace muchos años. Fue protagonista del bloque empresarial en 1990 ligado al partido político de Daniel Ortega.

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El clan Coronel Kinloch

El nuevo directivo del Banco Central forma parte del clan Coronel Kinloch: sus hermanos son embajadores, una es ministra y otro vinculado a los negocios del régimen sandinista a través de Caruna.

Él es hermano de Ian Coronel Kinloch, quien recientemente fue nombrado embajador en China. Su hermana, María Amelia Coronel Kinloch, es titular del Ministerio de Gobernación desde 2017.

Otro hermano es Rodrigo Coronel Kinloch, quien ocupa el cargo de embajador de Nicaragua ante Brunei Darussalam, con sede en la Ciudad de Seúl, República de Corea.

Carlos Coronel Kinloch, también hermano del nuevo funcionario, fue relacionado con la Cooperativa de Ahorro y Crédito Caja Rural Nacional (Caruna), según una investigación de La Prensa.

Él tenía el cargo de secretario de la junta directiva de Tichana Waters S.A., un proyecto que nació con la idea de abastecer de energía limpia (hidroeléctrica) a Ometepe, uno de los más grandes atractivos turísticos del país.

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Desde que Daniel Ortega se reeligió a un cuarto mandato consecutivo para gobernar Nicaragua bajo la sombra de la represión y persecución política a sus detractores, ha realizado múltiples cambios en su gabinete. Muchos funcionarios han renunciado a su cargo y mantienen un bajo perfil, mientras otros son destituidos sin conocerse las razones.