Familiares de Yoel Ibzan Sandino Ibarra, joven activista de la plataforma Mentes Libres, lograron verlo por primera vez desde que fue capturado hace dos meses en un gimnasio de Managua. Hasta este miércoles 5 de enero, sus parientes permanecían con la incertidumbre de saber el estado físico y mental de Sandino, ya que además de no dar información al respecto, las autoridades le negaban las visitas que solicitaban.
De acuerdo con su familia Yoel Sandino posee un quiste en la cabeza, que es una patología congénita, la cual debe mantenerse en constante chequeo, pero que está desatendido desde que está detenido.
«Es muy duro (porque) no lo han llevado a la cita al (Hospital) Lenin Fonseca a su cita con el neurólogo para hacerle el examen de resonancia por su patología. Es demasiado cruel e inhumano el encierro en contra de un joven que no le hace daño a nadie», expresan.
Sin embargo, en la visita que recibió el miércoles sí le permitieron ingresar medicamentos para atender dolores de cabeza y otros síntomas relacionados al estrés de estar detenido.
Sometido a interrogatorios constantes
Desde el 5 de noviembre del 2021 que Sandino fue detenido por agentes de inteligencia, quienes lo golpearon para posteriormente trasladarlo a la estación dos de Policía, hasta su traslado al sistema penitenciario Jorge Navarro «La Modelo» de Tipitapa, el activista fue interrogado diariamente por la madrugada, según el testimonio de sus familiares a Nicaragua Investiga.
«Le preguntaban nombres, situaciones, que quien lo financian, cosas como estas, pero él dijo que no sabía nada de lo que le dicen. También le llaman golpista, traidor, yanqui, que es enemigo de la patria… cosas así», mencionan.
Familiares de presos políticos rompen el silencio y denuncian graves torturas en El Chipote
A pesar de estar detenido y prácticamente incomunicado, el joven de 25 años envió un mensaje a la población nicaragüense: «Me encuentro fuerte con fe y aún qué la dictadura me tiene encerrado en una cárcel injustamente, mi mente sigue siendo libre».
Sandino fue trasladado a La Modelo el 3 de diciembre del año pasado, junto con otros presos políticos que permanecían en las estaciones de diferentes distritos policiales.
Otros presos políticos sufren deterioro en su salud
En esta semana, otros presos políticos que están en «El Chipote» también han recibido visitas por parte de sus familiares. Varios de ellos presentan diferentes dolencias relacionadas al encierro y las condiciones de las celdas en que se encuentran, y a otros las enfermedades que tienen han deteriorado significativamente su salud, y han reducido su peso.
Uno de los casos evidenciados de este grupo de presos políticos es el del abogado Roger Reyes, integrante de la Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB), detenido y acusado por conspiración a la patria. La esposa de Reyes, Fernanda Guevara denunció que está perdiendo la memoria, y que tiene que escribir o solicitarle ayuda a su compañero de celda para recordar cosas cotidianas como cepillarse los dientes.
Reyes también se mostró desesperado en la última visita, por olvidar el nombre de sus hijas y detalles de su aprehensión.
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