En pleno apogeo de la pandemia en nuestro país, más de 700 personas han dado positivo a la prueba del COVID-19 en una semana, de las cuales supuestamente un nicaragüense muere por la enfermedad cada ocho días, mientras los demás pueden presentar sintomatología entre leve, moderado y grave o severo.
«En muchas ocasiones» los casos graves por COVID-19 se dan luego que la persona no recibió atención médica o tratamiento durante los primeros cinco días de sintomatología, según explicó un epidemiólogo, quien habló en anonimato.
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Para este médico, los «días más críticos» por contagios de COVID-19 pueden variar entre los días 10 y 14 después de presentar el primer síntoma, tiempo en el que también pueden verse involucradas las personas ya inoculadas con las dos dosis de la vacuna contra pandemia.
Por ello, la importancia de continuar con las medidas de prevención y mitigación de contagio por coronavirus.
De acuerdo a su experiencia al atender pacientes afectados por coronavirus, entre los días 3 y 5 la persona empieza a experimentar hipertermia (ocurre cuando la temperatura corporal asciende a niveles superiores a los normales) y tos seca, que posteriormente en el día séptimo, se convierte en tos productiva (aquella en la que se arroja flema). A estos se les conoce como «fase aguda» del COVID-19, la cual desaparece 30 días después del primer síntoma.
«Todo paciente que no se atiende en los primeros cinco días, tiene la posibilidad de agravarse y exponerse como un paciente crítico», el médico.
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«Una vez que pasas el día cinco tenés la plena seguridad de que vas a llegar a un estado más delicado, te podes agravar y ser un paciente crítico de UCI (Unidad de Cuidados Intensivos)», agregó.
¿Por qué son los días más críticos?
En lo que respecta a la saturación de oxígeno, el paciente empieza a medir bajas entre el 96% al 93% en los día 8 y 9. Luego, en el día décimo la persona experimenta saturación baja entre 89% a 87%, por lo cual deberá recibir urgentemente la asistencia de un tanque de oxígeno.
Posteriormente, los días considerados más «críticos», es decir, entre el 10 y el 14 después del primer síntoma, la persona empieza a saturar oxígeno por debajo del 77% y presenta «picos febriles» que pueden encaminarlo a un desenlace mortal.
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Karen Gallardo, terapeuta respiratoria en el Community Memorial Hospital de Ventura en Estados Unidos, relató al sitio de noticias Los Angeles Times que existen varias fases en pacientes enfermos por COVID-19 severo. A su criterio, ninguno ha sido fácil y «rara vez terminan bien».
Según su testimonio, todas las fases requieren de asistencia de oxígeno, pues cada vez se vuelve aún más difícil la respiración del paciente. La administración de este producto pasa de 4 litros a 40 litros por minuto. Al no observar mejoría, los médicos proceden a intubar, uno de los procesos médicos por la gravedad del coronavirus y del que pocos logran sobrevivir.
Según el experto que habló bajo el anonimato, «en muchas ocasiones» los pacientes enfermos por COVID-19 severo y que presentan mayores complicaciones, no sobreviven después de dos o tres días posterior de entrar a estado crítico.
El galeno enfatiza en la atención temprana para evitar un cuadro clínico se complique y de ser posible vacunarse en el esquema completo establecido por las autoridades sanitarias.
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