Luego de constantes desencuentros y señalamientos de una u otra parte, la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia (ACJD) finalmente optó por retirarse de la Coalición Nacional.
La decisión fue tomada con 15 votos a favor y seis en contra. Hay que recordar que hace unas semanas circuló un audio de Mario Arana en el que aseguraba que luego de la asamblea general de la Organización de Estados Americanos (OEA), la Alianza iba a retirarse definitivamente de la Coalición Nacional.
La Alianza asegura que su retiro tiene como fin impulsar su propia plataforma política y electoral para hacerle frente a Daniel Ortega.
«No somos divisionistas»
En conferencia de prensa, el director ejecutivo de la Alianza Cívica, Juan Sebastián Chamorro, rechazó tajantemente los señalamientos de que con esta decisión están abonando más a la división de la oposición.
«No somos divisionistas. Queremos dejar claro que esa palabra no va con nosotros», aseguró negando que la Coalición sea la «opción de unidad de toda la oposición».
«Nosotros nos resistimos a ser complacientes de la situación actual de la falta de unidad de las fuerzas opositoras nicaragüenses, por eso es que estamos dando este paso que para algunos podrá sonar contradictorio, pero lo que queremos hacer es de manera transparente y valiente, decir que tenemos un problema y tenemos que solucionarlo», expresó.
Dice que en la Coalición no todos son opositores
Según Chamorro, ellos supuestamente apuestan “a nueva forma de hacer política” eliminando el “dedazo”, el «amiguismo», el «transfuguismo» y el “caudillismo”, siendo una opción que “ilusione a los nicaragüenses”.
El dirigente político quiso desmarcarse de algunos miembros de la Coalición Nacional señalados de haber sido en algún momento aliados o haber pactado con el FSLN. «No todos los que están dentro de la Coalición son verdaderos opositores», refirió.
«Somos y seremos opción de gobierno, no nos estamos peleando por un cargo político», expresó. «Aquí no hay nadie que ha pactado con Ortega», agregó.
Chamorro también pidió respeto para los miembros de la Alianza “se la jugaron” en abril del 2018, pero que han sido “excluidos” y “rechazados” por la Coalición.
Desconocen críticas de los territorios
Yubrank Suazo, otro de los miembros de la Alianza, desconoció a las «tres personas» que, según él, «se han adjudicado la representación de los territorios» y rechazado esta ruptura.
«Nosotros hemos tenido reuniones con los dirigentes territoriales en el cual se les desconoció y no se les dio ningún mandato para que hablaran a favor o en nombre de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia. Nosotros tenemos el respaldo mayoritario», explicó.
En la conferencia, la asesora María Asunción Moreno repudió a los grupos territoriales que se han manifestado en contra de la decisión de la Alianza.
«No se hace unidad atacando al aliado en las redes sociales y en los medios de comunicación. No se hace unidad creando estructuras paralelas», dijo Moreno, quien incluso aseguró que la decisión fue tomada “pensando en los presos políticos».
José Adán Aguerri, otro de los directivos de este grupo opositor, rechazó igualmente las críticas de las que están siendo objeto.
Aguirre reiteró que ellos seguirán apostando por una unidad «útil» y «eficaz» para ganar las elecciones del 2001, si es que primer el gobierno restituye los derechos civiles y cumple los acuerdos del 29 de marzo del 2019, que incluye la liberación de presos políticos y la reforma electoral.
UNAB lamenta acciones que debiliten a la oposición
En un comunicado emitido este lunes, la Alianza Nacional Azul y Blanco (UNAB) lamentó “toda acción que reste a los procesos de consolidación de un único bloque opositor”.
“Los ejemplos a nivel internacional evidencian que en unidad se logra fortaleza y en la división, solo ganan los Ortega-Murillo”, indica.
“Asumimos el reto de continuar apostando por la unidad sincera en la Coalición Nacional y fortaleciendo nuestras estrategias de cara al año 2021″, sostiene.
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