El joven electricista Engels Báez Caballero, de 27 años, se convirtió en la nueva víctima mortal de la delincuencia en el país. El domingo por la noche en el barrio El Sagrario, de la ciudad de León, unos asaltantes lo atacaron de forma brutal hasta acabar con su vida.
La víctima era originario del barrio Loma Linda, del distrito 3 de Managua, pero se había trasladado hace un mes a León para trabajar como electricista.
El supuesto móvil del crimen fue el intento de robo de un teléfono celular.
De manera extraoficial se maneja que la policía de León detuvo a dos sospechosos, sin embargo, se afirma que los involucrados en el crimen fueron cuatro.
Los nicaragüenses cada día se ven más vulnerables ante la delincuencia, sin embargo, la Policía Nacional insiste en que Nicaragua es uno de los países más seguros de Centroamérica y América Latina.
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