Un nicaragüense se llenó de valor y denunció este jueves 14 de febrero en las afueras del Estadio Ciudad de los Deportes, de la Ciudad de México, al dueño del equipo del Real Estelí por estar vinculado a la masacre de 2018.
“Estoy de pasadita por aquí y vengo a aprovechar para hacer una protesta en contra del gobierno de Nicaragua, porque el dueño del equipo del Real Estelí es uno de los que dijo “Vamos con todo” en las protestas de 2018 donde murieron más de 500 personas”, denunció ante un comunicador cuyo video que se ha vuelto viral en las redes sociales.
El Real Estelí es uno de los dos equipos de fútbol más importantes de Nicaragua, y es apadrinado por el todopoderoso secretario de la Alcaldía de Managua, Fidel Moreno.
Moreno es un funcionario leal al régimen y aparece en eventos políticos al lado de Daniel Ortega y Rosario Murillo, los dictadores nicaragüenses.
De acuerdo a investigaciones realizadas por Divergentes, el Real Estelí paga los mejores salarios de la liga que van desde los 800 dólares para los juveniles con gran proyección, hasta los 2,000 y 6,000 dólares para extranjeros y otros jugadores nacionales.
La investigación manifiesta que, gracias a Moreno, a quien se le señala de ser el “padrino del fútbol nacional en Nicaragua”, el Real Estelí ha logrado llegar hasta donde está, colocándose muy por encima de los demás clubes del país, porque “tiene más dinero”.
Fidel Moreno al lado izquierdo con camisa blanca partidaria y pañoleta del FSLN en el cuello, durante un evento político en Managua al lado de Daniel Ortega y Rosario Murillo. Foto | Prensa oficialista.
Otoniel Olivas, director técnico del Real Estelí y protegido de Fidel Moreno, fue denunciado semanas atrás por formar parte de los grupos del Frente Sandinista que atacaron las protestas antigubernamentales en Estelí en el año 2018.
“Fidel Moreno es el dueño”
“Él (Fidel Moreno) es parte del gobierno dictatorial de Nicaragua y ese señor es el dueño del Real Estelí”, denunció el nicaragüense.
El manifestante llevó una pancarta donde se escribieron frases como: “Ortega-Murillo asesinos”, “Te amo Nicaragua”, “Viva Nicaragua libre”, “Abajo la dictadura”, “Como me duele respirar”.
“Esta frase que está aquí que dice: “Me duele respirar”, fue hecha por Alvarito Conrado minutos antes de morir con una bala en la garganta”, explicó el hombre.
Álvaro Conrado fue un estudiante de secundaria, que se convirtió en mártir a los 15 años, durante las protestas de 2018 contra la dictadura sandinista, después de morir tras negarle atención en un hospital de Managua, luego de ser herido de bala en la garganta por paramilitares. Él únicamente llevaba agua a los universitarios.
El nicaragüense dijo que intentó entrar al Estadio Ciudad de los Deportes, de la Ciudad de México, donde se iba a enfrentar el Real Estelí y América. “Pero no me dejaron por la visibilidad de las personas. Las personas que estaban a cargo de la puerta me dijeron que no podía entrar. Ya intenté y voy a desistir entrar, por las personas que necesitan ver el partido”, resaltó.
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Uriel Pineda, abogado nicaragüense, máster y consultor independiente en Derechos Humanos, radicado en México, asistió al partido y aprovechó para protestar en contra del régimen sandinista.
“Cualquier logro de un nicaragüense debe ser una oportunidad para demandar justicia y democracia en nuestro país”, escribió al publicar una foto en sus redes sociales con la frase: “Justicia y democracia Nicaragua”.
Pineda es uno de los 94 nicaragüenses que fueron despojados de su nacionalidad por supuesta “traición a la patria”, además de ordenar la confiscación de sus bienes.
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