Los funcionarios del régimen de Ortega se han tomado muy en serio la supuesta caída de la hegemonía del dólar y el paso a un “nuevo orden mundial”, y tal como si Nicaragua fuera un referente económico en el mundo, el canciller Denis Moncada expresó este viernes que el régimen busca unirse al BRICS.
El BRICS es un poderoso grupo de países con economías emergentes y prometedoras, conformado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que en conjunto se han propuesto convertirse en las economías dominantes hacia el año 2050.
Todas las naciones que conforman el BRICS son grandes en territorio, población y en aspectos económicos tienen fuerte presencia en el mercado internacional. Nicaragua por su parte dista abismalmente de todo ello.
Nicaragua ha recibido US$8,195.6 millones en remesas de EEUU desde el 2018
“Nicaragua ya expresó su interés de unirse a los BRICS. Es lógico porque es un nuevo camino, un mundo nuevo, donde los países en desarrollo pueden tener una mejor unidad y tener un mejor desarrollo, un mundo mejor, un mundo multipolar”, expresó, este jueves 29 de junio, Denis Moncada, ministro de Exteriores de Nicaragua en una entrevista concedida a la agencia rusa de noticias Sputnik.
¿Aceptará Rusia córdobas?
En la misma entrevista Moncada indicó que el régimen quiere pagar las importaciones del trigo procedente de Rusia, “en rublos o córdobas”, lo que estaría acorde a la campaña que han emprendido para debilitar al dólar estadounidense.
“Es un tema (tratar en monedas nacionales) de conversaciones que es universal entre amigos que luchan contra la hegemonía estadounidense. Son discusiones necesarias”, ha indicó Moncada.
Funcionarios del régimen Ortega-Murillo, entre ellos Denis Moncada, el ministro de Hacienda Iván Acosta y el mismo hijo de la pareja presidencial Laureano Ortega, que funge como canciller de facto, han mencionado en reiteradas ocasiones su deseo por dejar de depender del dólar estadounidense, siguiendo las pretensiones de China, Rusia y algunos gobiernos de izquierda.
Sin embargo, Nicaragua no es una economía fuerte, por el contrario, es una de las débiles de la región, a tal punto de ser el segundo país más pobre del continente americano, tiene una economía de muy bajo crecimiento y una matriz productiva deficiente en comparación a los países del BRICS, a tal punto que su PIB depende en un 22 % de las remesas procedentes en su mayoría de Estados Unidos, el país al que Ortega y sus aliados pretenden destronar como potencia mundial.
Un analista que recientemente habló bajo anonimato con Nicaragua Investiga pone en duda las aspiraciones de Ortega y su sueño con ver caer al dólar.
«¿Cuánto es el volumen de tales intercambios? Nicaragua tiene intercambios fuertes con Estados Unidos, Europa y Centroamérica. Con China, Rusia, Irán y Venezuela, muy poco. De tal manera que el señor Ortega tendría que explicar cómo y cuándo llegarían a volúmenes de intercambio similares con las economías del rublo, yuán y otras monedas», explicó.
A su criterio, lo que quisiera el régimen nicaragüense es evadir las sanciones, ya que en toda transacción bancaria que use el dólar como moneda «pasa por los ojos de los Estados Unidos».
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