La madrugada de este lunes un grupo de cinco hombres armados, quienes se presume procedían de Nicaragua, asaltaron un barco pesquero que se encontraba en las aguas del archipiélago de San Andrés, en Colombia.
Los hombres armados con fusiles AK-47 se habrían tomado el navío colombiano a las dos de la madrugada, según ha informado el medio de comunicación Infobae.
Cristian Harvey Corpus es el dueño del barco pesquero “Mar Azul”, que habría sido tomado por los cinco hombres armados en la zona de los cayos del norte. El ciudadano expuso ante medios locales, que los sujetos subieron e intimidaron a la tripulación con la supuesta “intención de asesinarlos para llevarse el barco y lo producido” en las labores de pesca.
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“Los tripulantes no oponían ninguna resistencia, porque se les recomendó muchas veces que no jugaran con su vida, que si algo pasaba los dejaran”, señaló. “Esta denuncia la quiero hacer porque hace mucho tiempo se ha venido diciéndole eso a la Armada a los guardacostas y de igual forma fui a la asamblea y no recibimos apoyo”, expresó el afectado.
Nicaragüenses se habrían tomado el cayo de Quitasueño
Además de esta situación, el ciudadano colombiano señaló que los nicaragüenses se tomaron el cayo Quitasueño y que tenía evidencias de que permanecían en el sitio. Indicó que estos pernoctan en el lugar sin que haya una reacción al respecto de parte de los colombianos.
“Es una crónica de una muerte anunciada todos sabemos lo que puede pasar allá afuera y estamos jugando con la vida de nuestros pescadores por no tomar medidas ante esta situaciones”, reiteró Corpus, quien además, solicitó a las autoridades colombianas retomar los patrullajes en la zona del cayo Quitasueño.
“Dicen que incautan barcos, pero son de gran dimensión. La artimaña que están utilizando los nicaragüenses es que llevan un barco madre, lo parquean en la zona limítrofe con Colombia y de ahí mandan lanchas rápidas y para cometer delitos, de los cuales fuimos víctimas”, agregó el colombiano.
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Situación podría tornarse más grave
Cristian Corpus señaló que esta vez solo se trató del atraco, pero que en el futuro la situación podría acabar en un homicidio desastroso para su comunidad. También aseguró que existe hostigamiento de parte de pescadores nicaragüenses contra sus compañeros colombianos.
Ante esta situación, Elizabeth Jay-Pang, representante del archipiélago de San Andrés y Providencia, denunció la situación ante el Congreso colombiano y extendió la petición de tomar acciones a la Cancillería, al Ministerio de Agricultura, la Armada Nacional y la Embajada de Colombia en Managua, ya que según ella, este y otros hechos similares afectan la seguridad de la actividad pesquera en la región.
Hasta el momento las autoridades nicaragüenses no se han referido respecto a este incidente denunciado por el afectado y la representante del archipiélago de San Andrés y Providencia ante el Congreso colombiano.
Un conflicto histórico
Desde hace casi dos siglos, Nicaragua y Colombia han librado una disputa por asuntos limítrofes en la zona del Caribe. El litigio fue llevado ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en La Haya, órgano que desde hace unos 10 años modificó los límites de ambos países mediante una sentencia.
Tras ese histórico fallo Colombia mantuvo su soberanía en el archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, además de los cayos que integran la zona. Agregado a ello, les concedió 12 millas náuticas del agua que les rodea.
En tanto, a Nicaragua se le habría otorgado entre 75,000 y 90,000 kilómetros cuadrados de mar.
Debido a esta situación de disputa territorial, ambos países han librado tensiones diplomáticas y largos enfrentamientos judiciales internacionales.
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