Casi un año después de haber sido calcinado tras un «lamentable atentado», la iglesia católica anunció que iniciaran las labores de «restauración» de la imagen de la Sangre de Cristo con un presupuesto de más de 800 mil córdobas y 113 mil dólares que han sido recaudados a través de donaciones individuales de la misma feligresía.
Luego de concluir la Eucaristía dominical este 27 de junio en la catedral de Managua, el cardenal Leopoldo José Brenes, dijo que bajo su jurisdicción de «arzobispo y amante a esta imagen» no permitirá que personas a las que considera «no van a desarrollar un trabajo profesional» realicen dicha tarea, por ello, recurrió a «monseñor Gonzalo de Villa, arzobispo de Guatemala» quien se dispuso a colaborar en la restauración de la Sangre de Cristo que el mismo religioso conoce.
«Desde el mes de agosto del año pasado hemos estado haciendo las gestiones con instituciones especializadas en la restauración de las imágenes (…) he consultado a mi buen hermano el señor arzobispo de Guatemala, quien en la arquidiócesis tiene un instituto profesional de imágenes, él estuvo mucho tiempo en Nicaragua, y él junto a su equipo dijo es bueno restaurarla y estamos a la orden» anunció Brenes.
Cardenal Brenes muestra el rostro calcinado de la imagen de la Sangre de Cristo.
Asimismo, explicó que «se está estudiando la posibilidad» de trasladar la imagen calcinada hacia el país vecino para iniciar labores debido a los «trabajo finos» que la misma requiere por los daños que le ocasionaron en muchas piezas que se van a reconstruir, de lo contrario, «eso implicaría estar trasladando personas de aquí para allá» señaló el cardenal nicaragüense.
Cardenal Leopoldo Brenes conmemora seis meses del atentado contra la Sangre de Cristo
«Ya a través del Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala, me visitó en nombre del señor embajador, el cónsul para decir que están dispuestos a apoyar, y también están haciendo un estudio y en un momento determinado nos van a visitar pero un primer momento me dijo posiblemente habrá que llevar la imagen a Guatemala» detalló Brenes.
«Hemos estado llevando este proceso con mucha calma» se dirigió el cardenal de manera enfática a la feligresía que lo acompaño en la catedral de Managua, y agregó que «el dinero no lo tenemos a mano» y «las ayudas que llegan en efectivo inmediatamente son depositadas en el banco» para evitar «malas intenciones, que las hermanas, que los sacerdotes, que el señor arzobispo está tocando ese dinero, no, ese dinero lo considero sagrado porque viene por aportes generosos de todos ustedes».
Por otro lado, Brenes recordó de su municipio natal (Ticuantepe) una frase de un sacerdote que le decía «cuentas claras, conservan amistades«, mientras agradecía las donaciones y solicitaba «confianza» para poder cumplir con este trabajo.
Cardenal Leopoldo Brenes junto a otros obispos y sacerdotes.
«Recordamos ese lamentable atentado»
EL pasado 31 de enero, el cardenal conmemoró durante una homilía en la Catedral de Managua los seis meses del acto terrorista a la Sangre de Cristo. «Con mucha tristeza a diario recordamos ese lamentable atentado», manifestó el líder de la iglesia Católica.
El rostro de la Sangre de Cristo permanece en una vitrina de vidrio tal y como quedó luego de la explosión, hecho que ocurrió un 31 de julio de 2020. La Policía Nacional no siguió las investigaciones y respaldó el «dictamen» de la vicepresidenta, Rosario Murillo, que señaló las causas del incendio fue por una supuesta veladora, pese a que ni siquiera se había realizado el peritaje correspondiente.
La iglesia Católica ha mantenido una tensa relación con el gobierno de Daniel Ortega luego de las protestas que estallaron en abril de 2018. Incluso, el caudillo sandinista tildó de «golpistas» a los sacerdotes y los acusó de «provocar» la violencia en el país, así como amenazas de fanáticos de la pareja presidencial que han dicho que los próximos a investigar por la Ley 1055 son los de «sotanas».
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