Al unísono de: “las madres no se rinden, exigen justicia”, decenas de nicaragüenses marcharon este domingo 29 de mayo en San José, Costa Rica.
La marcha es encabezada por las madres de jóvenes que perdieron la vida en la masacre del recordado 30 de mayo de 2018, en la que miles de nicaragüenses protestaban contra el régimen. Marcha que fue atacada por paramilitares y francotiradores ubicados en puntos estratégicos, uno de ellos el nuevo estadio nacional.
En la marcha de hoy, en la capital costarricense las madres dicen que demandan justicia y rechazan el feriado nacional del 30 de mayo declarado por la Asamblea Nacional nicaragüense, según las madres de las víctimas “es una burla”.
Nicaragüenses en la marcha de este 29 de mayo de 2022 en San José, Costa Rica.
“Demandamos justicia y rechazamos el día de las madres declarado feriado por la Asamblea Nacional”, cuenta Susana López, madre de Gerald Vázquez, quien fue asesinado en el ataque a la iglesia Divina Misericordia.
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Durante la marcha los participantes coreaban: “¿el pueblo dónde está?, el pueblo está en las calles exigiendo libertad”, “Ortega escucha, el pueblo está en la lucha”.
Candelaria Díaz es una de las madres de Masaya que perdió a su hijo el 30 de mayo de 2018, en sus declaraciones a la Voz de América durante la cobertura a la marcha, su voz se quebrantó y no pudo contener las lágrimas mientras hablaba sobre el asesinato de su hijo Carlos Manuel Díaz.
Candelaria Díaz, madre de Carlos Manuel López, mientras participaba en la marcha en Costa Rica.
“Por todos nuestros hijos que fueron asesinados, no hay nada que celebrar. Para nosotras el 30 de mayo no volverá a ser igual porque nuestros hijos no están. Nuestros hijos no nos volverán a decir ‘Felicidades mamá’. Que sepa Daniel Ortega que muchos niños quedaron en la orfandad”, Candelaria, mientras lloraba por el asesinato de su hijo.
Azucena Lopez, madre de Erick Antonio Jiménez Lopez también se hizo presente. Jiménez fue asesinado en la Operación Limpieza en Masaya. Ésta madre afirma que se exilió desde julio de 2018.
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Muchas madres que perdieron a sus hijos en las protestas se vieron obligadas a emigrar para resguardar su integridad física ante la falta de garantías a su seguridad por parte del Estado nicaragüense.
Durante las protestas más de 300 personas perdieron la vida a causa de la represión gubernamental, según organismos de derechos humanos como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Todas estas madres y familiares de los asesinados durante las protestas exigen justicia para sus víctimas, que los crímenes no queden impunes, un clamor que aún sigue derramando lágrimas de dolor y de impotencia.
En la marcha de este 29 de mayo, decenas de nicaragüenses de diferentes partes del país radicados en Costa Rica.
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