Mario Hurtado Jiménez, propietario de las casas de empeño PRISA, manifestó que está conversando con abogados de Estados Unidos para una demanda internacional contra el Estado de Nicaragua, en caso de que no le regresen “inmediatamente” todas sus propiedades y la empresa que tiene una inversión que supera los cinco millones de dólares.
“Estoy hablando con unos abogados en Estados Unidos para preparar una demanda internacional, en caso de que no me regresen inmediatamente todas mis propiedades y mi empresa. Hay instancias internacionales para esto, esto es viable me dijeron los abogados”, dijo al diario La Prensa.
También indicó que se comunicó con el Consulado de la Embajada de México en Nicaragua, y le solicitaron información. De igual forma, fue a la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, en Guadalajara, para hablar con ellos y ver el tema de la protección
“Hay una disposición general en México de protección de las inversiones de los mexicanos en el exterior”, agregó.
Hurtado aseguró que se comunicará con su inversionista principal de Estados Unidos sobre la situación de la empresa, para que también acuda al Departamento de Estado para interponer la denuncia contra Nicaragua.
No hay notificación del supuesto delito
El empresario mexico-nicaragüense afirmó que previo a reunirse con autoridades mexicanas, el gobierno de Nicaragua no le ha notificado sobre el supuesto delito por el que lo están investigando, ni por qué sus negocios y vivienda siguen tomados por Policía.
Dijo que los 150 trabajadores que permanecían retenidos por las fuerzas policiales fueron liberados el lunes, incluido su gerente general Óscar Durán, quien salió en libertad la madrugada del martes, pero que debía regresar a las siete de la mañana para seguir prestando declaraciones.
“No tiene celular, está incomunicado. Llegó a las 3:00 o 3:30 de la mañana a la casa, se acostó, se levantó, se bañó y se fue a las 7:00 para la Policía, salió corriendo para la nueva cita”, relató el empresario.
Explicó que el gerente no dio información sobre qué se le está investigando a la empresa, tampoco el motivo por el cual ocurrió la toma de la misma. A su vez, la Unidad de Análisis Financiero (UAF), a quien la empresa es sujeto obligado, no ha dado respuesta sobre la situación, a pesar de que el año pasado se les hizo una auditoría donde todo salió bien.
Agentes de la Policía Nacional se tomaron la mañana del lunes 15 de agosto las 38 sucursales de la casa de empeño PRISA, las cuales están ubicadas en diferentes localidades de Nicaragua. Las pérdidas son de unos 3 millones de dólares y hay unos 150 trabajadores y 20 mil clientes afectados.
Los agentes también se tomaron la casa de habitación del empresario, ubicada en Ticuantepe.
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