La mayoría de los afiliados al Movimiento Renovador Sandinista (MRS) ha considerado que es «adecuado y necesario» cambiar el nombre del partido, cuya personalidad jurídica fue retirada en 2008 por el Consejo Supremo Electoral (CSE). La primera consulta a las bases de ese movimiento sobre el tema se realizó hace una semana y el 81.1% de las personas consultadas se mostraron a favor del cambio.
La exguerrillera y fundadora de este partido, Dora María Téllez, dijo en una entrevista al diario La Prensa que «la palabra sandinista ya me da repelo», y desde entonces se hizo público que pretendían separarse de sus orígenes y crear una línea clara de división entre ellos y el FSLN.
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En un comunicado de prensa del partido señala que durante la semana pasada se «realizó la primera consulta con afiliadas y afiliados sobre la pertinencia del cambio de nombre del MRS».
El MRS inicia su proceso de consulta para cambiarse el nombre y el símbolo de este partido. Foto: Cortesía
Hugo Torres, vicepresidente del MRS, asegura que la consulta no solo fue con los miembros del órgano de dirección, sino con la membresía en general para poner a «tono con la realidad que estamos viviendo» en Nicaragua. Él se refiere a las protestas de 2018 hasta la fecha, lo cual provocó cambios en el país.
«Se abrió una nueva etapa política y social en el país, y en consecuencia un partido que se llame moderno debe ponerse a tono con esos cambios: el MRS tiene esa característica y por eso convocamos esta convención extraordinaria», manifestó Torres vía telefónica a Nicaragua Investiga.
Podría ser un cambio radical
Dora María Téllez dijo a Nicaragua Investiga que la encuesta se corrió durante una semana donde participaron una gran cantidad de afiliados y afiladas. Asegura que un 19% se pronunció en contra.
«Todo eso se lo estamos pasando a los convencionales que son los que tienen que tomar la decisión, la convención comienza en octubre y la preconvención formalmente arranca el 16 de septiembre para hacer todos los debates: el nombre del programa, de los símbolos y de la organización del partido», puntualizó Téllez.
Agrega que se puede apreciar que una gran mayoría quiere un cambio del MRS para «quitar el apellido sandinista, aunque hay gente que está proponiendo cambios de nombres más radicales», indicó.
Estas posiciones se llevan a un debate abierto para se establezca qué es lo que quieren decir y lo que quieren significar. «Estamos usando mecanismo profundamente democráticos», dice Téllez.
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«La decisión final le corresponde a la Gran Convención, y en el caso de nombres, símbolos y organización que son temas que están establecidos en los estatutos, se requiere dos tercios de los votos de los convencionales para aprobarse», dice Téllez.
Estallido social aceleró el proceso de cambio de nombre
De acuerdo a su opinión de Hugo Torres, la revisión del nombre y de sus símbolos ya tenía el foco de observación desde antes del estallido social de 2018. A lo interno del partido ya se venían debatiendo el tema del nombre, pero esto se aceleró después de la represión estatal de ese entonces.
«Ortega con su baño de sangre ha convertido en un estigma la palabra «sandinista». Nada tiene que ver Sandino con eso, pero es una realidad que la gente identifica al orteguismo como el sandinismo por más esfuerzos que hemos hecho para que se separen los dos conceptos», asegura Torres.
Agrega que la sustitución de otro nombre es un debate aparte, pero alega que los nuevos nombres propuestos tienen que reflejar los nuevos tiempos y lo que quiere ser el partido para el futuro, para la juventud y la mayoría.
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