El periodista Óscar García Vallecillo interpuso una demanda laboral contra los propietarios de Canal 12, luego de haber renunciado 31 de julio de 2020 por una serie de inconformidades. Una de las razones de su renuncia fue porque su salario se había bajado más de 60% de forma unilateral cuando se dio el COVID19, asegura.
El caso de la demanda se encuentra en apelación por parte de los demandados. «Lo que espero es que el tribunal laboral deje firme la sentencia que ya emitió la jueza, diciendo que se me pagara mi liquidación», comentó García a Nicaragua Investiga.
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En el juicio, los demandados presentaron tres testigos que fueron compañeros de trabajo de Óscar García, pero fueron «desestimados porque decían cosas que no venían al caso», asegura. El periodista asevera que testificaron diciendo que no había trabajado en el canal. «Eso es una cosa irrisoria», dice. «Lo que yo pido es mi liquidación», reclama.
«A mí no me corrieron, yo renuncié, yo demandé y gané la demanda. Ahora ellos están apelando a la sentencia a mi favor», insiste García, y agrega la apelación obedece porque no le quieren pagar y que fue despedido: «eso es lo que tratan descaradamente argumentar», señala. El periodista espera que la resolución de la sentencia sea apegada a lo que la jueza dictaminó a su favor.
Buscó apoyo de organizaciones de periodistas
Durante este proceso dice que buscó el apoyo de las organizaciones periodísticas y de derechos humanos para dar a conocer el caso y percibir la respuesta que recibió de cada una de ellas. Sostiene que hay una variedad de «contradicciones en cuanto a la defensa de los derechos humanos y defender aquellos casos que pueden llegar a contravenir intereses de organizaciones que solamente están para recaudar fondos», apostilló.
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El periodista manifestó en una entrevista pasada a este medio de comunicación que su demanda laboral no es relacionada al embargo que impuso el fisco al medio televisivo, puesto que el 11 de septiembre de 2020 la Dirección General de Ingresos (DGI), le reclama al canal una deuda que asciende a los 28 millones de córdobas, meses después de haber renunciado a su trabajo como presentador de noticia de dicho canal.
La liquidación que se le debe a Óscar García son más de 8 millones de córdobas, según dictó una jueza local.
García trabajó durante casi trece años en Canal 12, Nicavisión, propiedad de la familia Valle, el cual atraviesa un embargo impuesto por la Dirección General de Ingresos (DGI) .
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