La joven Amaya Coppens, ex presa política, cuestionó a través de una publicación en Facebook el papel que juega actualmente la oposición nicaragüense, quienes mantienen una reñida disputa por candidaturas dejando de lado la situación de quienes continúan detenidos de forma arbitraria y bajo constantes amenazas.
La joven recordó que la acción que le ayudó a determinar que “no estaban en el mismo barco” fue el hecho de que cuando “entre lágrimas” les solicitaron un paro nacional por estar siendo perseguidos por el gobierno, a quienes calificó de “los ungidos”, la respuesta que obtuvieron es que “no tenemos tiempo para esto”. “Tan insensible, tan seco y corto, así zanjaron el tema” agregó.
Humberto Ortega pide «unidad» y «elecciones libres» en noviembre
Coppens sostuvo que el silencio obtenido por estos grupos fue clave para reconocer que al final los presos políticos “fuimos efectos colaterales, fichas de cambio, nombres en sus pancartas publicitarias” y para que su falta de actuación no sea cuestionada lo que hacen es brindar flores y mensajes de repudio “pero libertad y justicia no, no mientras no convenga, a menos que seas de los ‘importantes’. Vamos a hablar de vos, pero con vos mejor no, incomodas, haces bulla, cuestionas, lo que haces es división”.
Esta no sería la primera vez que una persona excarcelada cuestiona públicamente los discursos de los miembros de la oposición. El joven John Cerna, quien continúa detenido por oponerse al gobierno de Daniel Ortega, cuestionó a través de una carta el año pasado que la oposición “solo busca su cuota de poder y su discurso es fuera de sitio porque nunca han estado, ni tendrán cercanía con nosotros”. Y criticó que utilicen su fotografía “como campo mediático” agregando que “somos más de 90 y no somos solo una cifra; yo no soy la representación de ustedes, ni de todos los presos políticos”.
Un drástico cambio en los discursos
Nicaragua se encuentra sumergida en una crisis política desde hace 3 años, la cual ha afectado al resto de sectores del país, dejando más de 800 personas detenidas de forma arbitraria —de las cuales al menos 100 continúan tras las rejas—, más de 300 fallecidas y más de 100 mil exiliadas. Desde entonces la joven resalta que “seguimos con pesadillas, con nuestras cicatrices y nuestras vidas desmoronadas, mientras Cristiana se queja del barullo que no la dejaba tomarse su cafecito tranquila, porque a pesar de sus largas piernas aristocráticas no logra tocar la tierra, y un grupo de machos conservadores se reúne a comparar sus diplomas”.
Las críticas de Coppens han sido fuertes y directas. Hace unas semanas tres aspirantes a la presidencia sostuvieron un debate público que terminó incomodando a parte de la población debido a las posiciones expresadas, desde el uso de discursos religiosos en temas políticos, hasta la exposición de sus percepciones sobre temas polémicos como el aborto y el matrimonio igualitario, que muchos consideran se usan para atraer apoyo popular. De igual forma, en esta última semana Cristiana Chamorro emitió un llamado público a la vicepresidenta Rosario Murillo para debatir sobre los señalamientos que se le han adjudicado contra su familia.
Coopens recalcó a Radio Corporación que su crítica no solamente es a Cristiana, «sino a todo este circo electoral, a todas las personas que están participando de esto, por la manera que lo están haciendo y en su particular (a Cristiana Chamorro) por la desconexión que se nota hacia las vivencias del pueblo nicaragüense y a todos les diría eso; intenten cambiar esa hambre de poder por empatía, por lo que se ha vivido y se sigue viviendo».
“En lugar de pedir debates con la dictadura, que sabemos que no se van a dar, en lugar de publicitarse, exijan libertad. Si sus prioridades no coinciden con las nuestras se las recordamos: antes que sus campañas, está la vida, la libertad y la justicia” enfatizó Coppens en su escrito.
Antiguos MRS interponen mecanismo jurídico contra Ley de Ciberdelitos
Durante los últimos meses los diversos grupos y partidos de oposición en Nicaragua han reducido su nivel de aprobación en la población, según lo muestran los resultados de encuestas realizadas este año en comparación con las que se llevaron a cabo durante el inicio del 2020. Públicamente estos han sido cuestionados por aparentemente haber cambiado el objetivo de sus reuniones, pues mientras en 2018 y 2019 todos parecían enfocados en la liberación de los presos políticos y la aplicación de la justicia para todos los casos de violación a los derechos humanos, desde 2020 los discursos se han centrado en el tema de las elecciones y quienes ocuparían las candidaturas, pasando a un segundo campo a quienes aún continúan siendo víctimas de agresiones por las autoridades de gobierno.
You must be logged in to post a comment Login